45 Xiana Trigo desarrolla su labor asistencial en la Clínica Veterinaria Vilanova, un centro con especial dedicación a la dermatología. Además, ocupa el cargo de vocal en el Colegio Oficial de Veterinarios de Pontevedra. Con una trayectoria de 16 años en clínica generalista, prevención, medicina interna y ecografía básica, conoce en profundidad las necesidades del sector. Cuando se le pregunta qué urge abordar con mayor rapidez, su respuesta es inmediata: “La falta de personal para trabajar en las clínicas de pequeños animales”. Una carencia que atribuye a las condiciones laborales: “Son jornadas largas de trabajo, usualmente con guardias, con mucha carga mental y salarios nada acordes a la responsabilidad de nuestra actividad”. Entre los aspectos que más disfruta del ejercicio profesional, Xiana Trigo destaca la relación directa con los tutores. “Nuestro centro es especializado en dermatología y, por eso, somos conscientes de que remitir los casos complejos es fundamental para ofrecer el mejor servicio”. La especialización, combinada con una adecuada red de derivación, constituye para ella un eje esencial de la calidad asistencial. En su opinión, el enfoque One Health es la base de cualquier sistema sanitario moderno. “No podemos mejorar nuestra calidad de vida si la fauna y la flora que nos rodea se deterioran, el ciclo de la vida es un equilibrio que nos engloba a todos”, sostiene con convicción. Y reivindica con claridad el papel de la profesión: “Como sanitarios debemos conseguir nuestro sitio equiparado a otras profesiones, y lo primero que debemos hacer es visibilizarnos”. Sobre la entrada en vigor del Real Decreto relativo a los medicamentos veterinarios, Xiana Trigo reconoce que ha tenido un impacto especialmente duro en el día a día clínico. “Venimos años concienciando sobre el uso responsable de los antibióticos, y esta norma no hace más que aumentar nuestra carga administrativa”. Los veterinarios, afirma, se han sentido excluidos del proceso regulatorio. “Si nos hubiesen consultado a la hora de elaborar la norma, no habrían generado la frustración e impotencia que sentimos cuando se juzga nuestro trabajo”. Xiana Trigo (C.V. Vilanova, Pontevedra) “LA FALTA DE PERSONAL PARA TRABAJAR EN LAS CLÍNICAS DE PEQUEÑOS ANIMALES ES UNO DE LOS TEMAS QUE URGE ABORDAR” La prevención sigue siendo la herramienta más efectiva. Xiana Trigo señala que los avances en vacunas y antiparasitarios han reducido drásticamente la incidencia de determinadas patologías. “Yo personalmente no he visto casos clínicos de moquillo canino, y los de sarna demodécica o sarna sarcóptica son anecdóticos desde la aparición de los comprimidos de isoxazolinas como preventivos de pulgas y garrapatas”. Ante la no obligatoriedad de la vacuna antirrábica en Galicia, considera imprescindible su implantación. “No debemos olvidar que es una enfermedad zoonótica y mortal de la que siguen apareciendo casos anualmente en nuestro país”. Respecto a la leishmaniosis, recalca la importancia de la protección integral. “Las condiciones en las que se desarrolla el mosquito que la transmite se van extendiendo a más lugares y, además, las enfermedades se propagan debido a los viajes y movimientos de las personas”, explica, señalando la necesidad de collares y pipetas repelentes, vacunas o inmunoestimulantes. La exigencia emocional del trabajo veterinario y la implicación profunda con los pacientes derivan con frecuencia en burnout. “Acabamos quemados de nuestro trabajo y se hace difícil encontrar tiempo libre para realizar actividades que nos evadan de nuestras responsabilidades”, reconoce.
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