77 im veterinaria salud, de la educación y del ámbito social, las terapias asistidas con animales comportan otra serie de beneficios físicos y psicológicos que repercuten en la vida de las personas. En este sentido, Nuria Máximo destaca que dichas terapias son “una parte de las IAA, desarrollada por profesionales del ámbito de la salud, que se han especializado en ello y que, junto a la labor de guías caninos o equinos, diseñan los proyectos para la consecución de objetivos terapéuticos”. Unos objetivos que van enfocados a los aspectos que la persona necesite. “Los resultados con mayor evidencia son aquellos que van dirigidos al ámbito social y de la comunicación en personas mayores institucionalizadas, la reducción del aislamiento y el dolor emocional en los programas de prevención del suicidio, o la reducción de la sintomatología en algunas patologías, por poner algunos ejemplos”, afirma. Así, la Cátedra Animales y Sociedad que ella coordina en la URJC, es un grupo especializado de investigadores y profesionales, procedentes dedistintas disciplinas, que sehanpuestoal servicio de los objetivos de la cátedra. A saber: conocer los principios que rigenel bienestar animal, la vinculación respetuosa inter-especies y el beneficiode las relaciones saludables para todos los elementos que participan. Así como, por supuesto, y un pilar igual de importanteque los anteriores, ladifusiónde todos esos hallazgos. Tal y como nos comenta la coordinadora, las líneas de actuación se agrupan en tres áreas bien diferenciadas: investigación, formación y divulgación. “Para ésta última, resulta fundamental la participación de los científicos colaboradores con la Cátedra y la publicación de sus hallazgos en nuestro blog”, asegura. Múltiples evidencias Como señalábamos anteriormente, una de las labores que lleva a cabo la Cátedra Animales y Sociedad es analizar cómo las relaciones entre los humanos y otras especies animales pueden ser beneficiosas desde el punto de vista de la salud. Y un punto en el que se ha incidido es la mejora de la salud mental gracias al contacto con animales. “Las investigaciones aportan buenas evidencias en cuanto a lamejora de la sintomatología en personas con síndrome de estrés postraumático, así como buenos efectos en la reducción de la ansiedad y el control de la ira”, destaca Máximo. “Asimismo, hemos comprobado que se obtiene un mayor compromiso en las terapias con adolescentes, así como una mejora de la autoestima, el bienestar subjetivo y la capacidad de afrontamiento de tareas en personas con enfermedad mental. Mientras que para la depresión hay diferentes estudios que afirman una disminución en las puntuaciones de diferentes escalas de depresión. Pero son necesarias más investigaciones para comprender los mecanismos mediante los cuales funcionan las terapias, lacantidadynúmerode sesiones necesarias y los mejores procedimientos a seguir. Además de lanecesidadde incluir, demanerasistemáticaenestos estudios, el impactoa corto y largoplazode laparticipaciónde los animales en supropiasalud”, afirma la coordinadorade laCátedra Institucional de Investigación Animales y Sociedad de la URJC. A pesar de las múltiples evidencias de la importancia y los beneficios en la salud (en todos los ámbitos), de las terapias asistidas con animales, resulta chocante que aún no se haya extendido la participación de los animales para ayudar a lamejora de la salud Los protagonistas Por lo que respecta a los animales que participan en esta iniciativa, hoy en día, desde la Cátedra se está trabajando con alrededor de 15 animales, a los que hemos querido dar, a lo largo de las líneas de este reportaje, su merecido protagonismo. Así, el nombre de los proyectos y los animales que trabajan en cada uno de ellos son los siguientes: • Huellas de colores: actualmente Alma (Hospital 12 de Octubre, Madrid) • Huellas en el corazón: Jaki, Piruleta, Ginny y Churrete (Hospital La Axarquía, Málaga) • Huellas en el corazón: Mico y Wanda (Hospital Reina Sofía, Córdoba) • Emociones con patas: Mamba, Rock, Sira, Mel y Jimena (Colegio Amanecer, Madrid) • Bubba, huellas que dibujan sonrisas: Sock, Coco, Milo y Sugus (perros), y Tac y Cacahuete (conejos), (Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer del Baix Llobregat) • Echando una pata: Flora, Jutte, Frida y Klaus (Junto con el Ayuntamiento de Parla, Madrid, y el Centro de Protección Animal Municipal)
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