La etapa de cachorro es para una mascota el momento más delicado. Con un sistema inmune heredado de la madre, que empieza a debilitarse a las pocas semanas del nacimiento, la mascota necesita recibir cuidados constantes y acudir al veterinario para una exhaustiva primera revisión, además de planificarle un plan adecuado y constante de vacunas y desparasitación.

De la importancia de suministrar una correcta alimentación al cachorro en los primeros meses, el papel vital de la Medicina Preventiva y los procedimientos para profesionales de Urgencias Pediátricas de animales versó el simposio organizado por Royal Canin y MSD Animal Health, enmarcado en los actos de Vetmadrid 2021.

"El momento del destete siempre es un momento crítico para los cachorros. Empieza a haber un crecimiento exponencial en la ganancia de peso de los cachorros. Por tanto, el cachorro que tiene muchas necesidades nutricionales necesita un apoyo especial", señaló Agustín Fernández, Field Scientific Communication Specialist, Royal Canin.

A consecuencia de la inmadurez del sistema digestivo, al crecer aparece la primera dificultad para los cachorros que es la asimilación de la lactosa. En ese sentido, la compañía trabaja en soluciones como Starter Mousse. Si bien es un alimento sólido, se puede dar en forma de papillas, pero Fernández lo recomendó como un buen alimento de transición entre la etapa de cachorro y la de adulto joven.

En busca de la palatabilidad de los alimentos, para que sean más atractivos para su consumo, los productos de Royal Canin para cachorros buscan "combatir la sensibilidad digestiva", a través de la inclusión de proteínas "fácilmente digestibles y de alto valor biológico".

Nutrientes que necesitan del refuerzo de tratamientos como la desparasitación. Tal como recordó Federica Burgio, Scientific Affairs Lead- MSD Animal Health: "la etapa neonatal es de bastante riesgo. Pero la etapa de cachorro también tiene sus riesgos. Por eso, desde MSD recomendamos desparasitar a la gestante desde el día 40 de gestación".

Una vez nacido, la multinacional ha desarrollado distintos tipos de vacunas para inyectar durante el primer medio año del cachorro. Burgio citó la Nobivac KC, que protege frente a enfermedades como la influenza y se suministra desde las tres semanas de vida; la Nobivac L4, cuyas ventajas es que no contiene adyuvantes y destaca su bajo contenido en BSA. Pero también aprovechó su intervención para presentar la joya de la corona de MSD: Nobivac DP PLUS.

"Una vacuna que protege frente a parvo y moquillo. La protección va a ser muy temprana, desde las 4 semanas. Gracias a las características de esta vacuna, a pesar de la presencia de anticuerpos maternos, la vacuna no va a perder eficacia. Va a responder tres días después frente a parvovirosis. Novivac DP PLUS aparece como una protección más adecuada y ajustada a la situación epidemiológica actual del parvo. Con la tecnología recombinante, es la solución más innovadora".

Sumado a la importancia del plan de vacunación está el de desparasitación. Burgió apuntó al cambio climático como un factor que ha influido en las pautas de desparasitación. "El aumento de temperaturas ha hecho que la presencia de pulgas y garrapatas esté presente durante todo el año. Mosquitos y flebótomos también están presentes en distintos lugares. Tenemos que protegerles con protocolos de desparasitación externa durante todo el año".

Todas estas acciones ha de tomarla el veterinario que revise en sus primeras ocasiones al cachorro. El papel de la Medicina Preventiva en el correcto estado de salud de los recién nacidos lo desgranó Maruska Suárez, Profesora Titular de Clínica Médica Veterinaria de la Facultad de Veterinaria de Lugo, con actividad asistencial en el Hospital Universitario Veterinario Rof Codina. Acreditada Avepa Medicina Interna.

"Es la etapa de la vida que más visitas al veterinario va a requerir, para permitir detectar de forma precoz enfermedades esporádicas como penetradas en la raza", comentó.

En primer lugar, el profesional se encarga de verificar el óptimo estado de salud de la mascota. Por eso, insistió en la importancia de realizar una "exploración completa, incluyendo las constantes vitales, los posibles puntos de dolor y el estatus nutricional". De igual manera, las patologías congénitas y enfermedades como las cardiacas se detectan también en esta revisión.

En el caso de perros, presenta la dificultad de la gran diversidad de razas que hay en esta especie. "Es uno de nuestros mayores hándicaps a la hora de recomendar estándares universales", reconoció.

Un factor diferenciador claro es el que presentan las razas de perros de pequeño tamaño y los grandes. Mientras los primeros "prácticamente a las 40 semanas" ya alcanzan su peso adulto, los de gran tamaño tardan entre 18 y 24 meses.

"Aquí cualquier error nutricional puede tener consecuencias mucho más graves para las razas grandes que para las razas pequeñas. Una nutrición balanceada no es cosa de un día o de dos. Por este motivo, hay que pesar con regularidad al cachorro para ir haciendo los ajustes necesarios de la cantidad de comida que necesitan".

También destacó la higiene dental como otro de los cuidados importantes en el cachorro. "Entre los 2 y los 7 meses", estimó, es el periodo que tardarán en surgir los dientes definitivos. Aconsejó el cepillado diario de los dientes del cachorro, actividad que acabarán percibiendo "como un juego".

Tal como señaló el resto de ponentes, desparasitación y vacunación son pilares de la Preventiva. Sin olvidar, mencionó Suárez, la "esterilización".

Procedimientos a seguir en Urgencias pediátricas

En un plano más técnico, el co-responsable del servicio de Urgencias y Medicina Intensiva de la Fundació Hospital Clínic Veterinari de la UAB, Lluis Bosch, dedicó su ponencia a dar pistas sobre cómo tratar a los cachorros que llegan a urgencias de un hospital veterinario. Un área donde el profesional "necesita estar muy preparado", afirmó.

En línea con Suárez, también destacó la importancia de realizar un examen físico al cachorro que llega hasta urgencias. "El examen físico inicial es importante tenerlo en cuenta. De dos semanas a seis meses la frecuencia cardiaca varía de los 200 latidos/minuto a ir bajando a partir de las 4 semanas. Igual pasa con la frecuencia respiratoria, la temperatura y la presión arterial media, que se va a mover".

Procedimientos como abrirles la boca para comprobar que no presentan defectos, examinar los orificios para verificar que no hay obstrucciones y revisar las extremidades o la orina, también son básicos en los primeros momentos.

Bosch mencionó algunas de las patologías más habituales en las primeras semanas de vida de los cachorros, que van desde alteraciones congénitas al distrés respiratorio; hipoglucemias, sepsis (una de las más habituales) o traumatismos. "En cualquiera de estos casos va a hacer falta una estabilización".

A su vez, hizo un repaso sobre las diferentes técnicas a aplicar en cachorros. Intubar a un animal de corta edad, "si hay obstrucción de la vía o tiene un distrés incontrolable". Un momento, el de poner la vía, que es de los primeras decisiones a tomar. En caso de animales de razas pequeñas, la opción de la vía intraósea es la alternativa. Al tratar con cachorros, que tienen unas venas muy frágiles, técnicas como el cutdown facilitan la colocación, atendiendo a que no se forme flebitis, que puede derivar en infección del animal.

En el caso de la fluidoterapia, será necesaria ante casos de deshidratación. "Es difícil evaluar la volemia y la hidratación, y de lo que sabemos el peso quizá es el mejor indicador de guía. El protocolo para tratar esta técnica es seguir las fases de Perfusión-Deshidratación-Mantenimiento", continuó.

Ante una posible hipoglucemia, recomendó recurri a la carnitina como solución para mejorar el estado del cachorro. Para extraer las muestras, hizo referencia a que algunos estudios indican que "es mejor" sacar la muestra en la oreja que en la almohadilla de la pata.

Si entra en shock, Bosch recomienda seguir indicadores como el hematocrito. Si este baja del 20%, puede ser señal de que el cachorro este en shock. Para sacarlo de ese estado, el plasma puede funcionar en su estabilización. "Eso sí, hay que utilizarlo siempre con cabeza y teniendo en cuenta que para el sistema inmune no va a hacer nada".

El doctor abordó particularidades de los cachorros gracias a su experiencia en urgencias pediátricas, como que el hematocrito va disminuyendo durante el primer mes de vida, mientras que el nivel de leucocitos lo hace en los primeros siete días. O bien, que la coagulación, la que llamó como la "gran olvidada en los cachorros", hay que evaluarla para determinar o no si el cachorro presenta hemofilia o intoxicación por rodenticidas, entre otros síntomas.

Una vez estable, se puede proceder a extraer las muestras de sangre e iniciar la nutrición "lo antes posible" mediante sondas, aunque el mejor de los casos es que mame de la madre.