El Hospital Veterinario 4 de Octubre, de pequeños animales y a diez minutos del centro de A Coruña, en Meicende (Arteixo), abrió sus puertas el 2 de enero de 2018 con atención 24 horas los 365 días del año. Paloma González de Ramos, su directora, valora positivamente la acogida que ha tenido, "tanto en A Coruña como en fincas de toda Galicia", en su primer año de existencia. Llevan en torno a los 1.500 pacientes. Es el primer gran hospital veterinario multidisciplinar del norte de España.

El edificio donde se ubica, de más de 2.500 metros cuadrados, está distribuido en tres plantas y dispone de 15 salas, tres quirófanos de última generación, piscina y el único laboratorio propio de células madre de España. Respecto a los quirófanos; uno es para traumatología y neurocirugía, el segundo para ci- rugía de tejidos blandos y el tercero destinado a procedimientos no estériles (pequeñas curas, endoscopias, procedimientos odontológicos, etcétera).

"Pretendemos aportar la especialización a la veterinaria en Galicia", indica González de Ramos. A su juicio, no es lo mismo que un veterinario se dedique globalmente a la cardiología, a la traumatología o a la anestesia, por ejemplo, a que haya un veterinario que concretamente trate cada una de las áreas. Asegura que la formación y la experiencia específicas derivan en mayor calidad de servicio para el paciente. Esta tendencia hacia la especialización es la que se percibe, a nivel general, en España.

Medicina interna, cirugía de tejidos blandos, neurología, cardiología, oncología, traumatología y cirugía ortopédica, anestesiología y reanimación (la de González de Ramos), rehabilitación, diagnóstico por imagen y terapia celular. Son las once especialidades que se abordan en este hospital. "Prácticamente, cubrimos todas las especialidades existentes. Y está previsto implementar las que no tenemos de cara a 2019", anuncia su directora. Subraya que en el equipo, compuesto por más de veinte personas contando recepción y limpieza, se encuentran veterinarios que han completado residencias europeas, veterinarios que son diplomados europeos y profesionales que están bien acreditados por la Asociación de Veterinarios Españoles Especialistas en Pequeños Animales (Avepa) en su respectiva especialidad o que tienen una formación y experiencia importante en esas áreas.

Doble función

El proyecto del Hospital Veterinario 4 de Octubre nació con una doble función: la asistencial propia de un gran centro hospitalario, y la académica, ofreciendo a los veterinarios y estudiantes una amplia programación formativa, desde cursos, seminarios y conferencias hasta internados y estancias regladas. La experiencia académica está yendo muy bien. En 2019, se iniciará un curso de formación para auxiliares técnicos veterinarios. "Hasta ahora, la labor en España de los auxiliares técnicos veterinarios queda bastante relegada a labores de recepción, de gestión de agendas, a vender piensos y accesorios y nosotros buscamos profesionales que nos den ese plus, que puedan ser capaces de ayudar al cirujano en quirófano o de colaborar con el veterinario a que esté en la hospitalización con los casos más complicados y buscamos ese tipo de profesionales", explica. Este curso de formación será eminentemente práctico.

El contar con el laboratorio propio de células madre supone tener cerca dicho recurso y poderlo utilizar con cualquier paciente que lo requiera. González de Ramos sostiene que donde más implantado está es en temas degenerativos articulares, como en artrosis, aunque posee más usos. "Ya estamos utilizando células madre en gatos con insuficiencia renal", matiza. El laboratorio propio les da la posibilidad de realizar estudios clínicos con pacientes con células madre. Actualmente, llevan a cabo un estudio en pacientes con artrosis.

Urgencias es uno de los servicios que más les demandan, porque es uno de los pocos centros en A Coruña que ofrece presencia 24 horas de un veterinario y un auxiliar. Igualmente, el de la hospitalización de animales, el de neurología y el de rehabilitación. No hay muchos centros en Galicia con piscina e hidroterapia. Éste es un centro de referencia para las pequeñas clínicas veterinarias. No practican medicina preventiva ni se implantan microchips. Sólo atienden de particulares Urgencias o segundas opiniones de especialistas. Se da prioridad a los casos derivados por los profesionales, por los compañeros.

¿Se nota el tener más recursos a la hora de los tratamientos? "Sin duda. Obviamente, cuantos más recursos tengas, mejor atención vas a poder dar. Eso se refleja en la calidad del servicio a tus pacientes", contesta. Si uno llega a consulta y hay cualquier duda, se puede sedar al perro y se le hace un TAC. Para el servicio de rehabilitación, las instalaciones que tienen son un plus. En rehabilitación en humana, la hidroterapia está totalmente implementada. La inversión para poner en marcha un hospital como éste fue sobre el millón de euros. Su TAC es de 16 cortes. El complejo veterinario también ofrece servicios adicionales como talleres de adiestramiento de perros.

González de Ramos se muestra convencida de que van en la dirección de cómo tiene que ser la clínica veterinaria del futuro. "Hay otros países, como puede ser Reino Unido, incluso Ir- landa, donde esto está completamente implementado, y los especialistas están incorporados en todos los centros. En España, vamos también en esa dirección. Hay cada vez más hospitales que cuentan con este sistema", reflexiona. Los clientes, en general, están muy agradecidos. "Hay pacientes que llegan en muy malas condiciones. Poder llegar a un diagnóstico y a una recuperación completa, tanto para los propietarios como para nosotros, es una gran satisfacción", dice.

El servicio de neurología ha ejecutado la primera cirugía intracraneal en Galicia. Asimismo, han puesto la primera resonancia magnética allí. "Todos los servicios están haciendo cosas muy novedosas, que seguramente en Galicia antes no se hacían", informa. En anestesia, controlan el dolor intra-operatorio con bloqueos locorregionales. Insiste en que van "por la correcta dirección" y que crecen poco a poco.

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