47 Gracias a los avances médicos, están mejorando los porcentajes de curación, especialmente si el diagnóstico es precoz. El trato con los tutores también requiere de una atención especial, ya que la mayoría acuden muy afectados, “buscando alternativas para sus mascotas y, en muchas ocasiones, con el esfuerzo de grandes desplazamientos”. Por tanto, se trata de una especialidad en marcado crecimiento en los últimos años, “debido al aumento exponencial del número de casos que diagnosticamos en la clínica diaria, y al desarrollo de las especialidades médicas, al igual que en medicina humana”, establece Martos. Los tutores cada vez están más implicados en el cuidado y la atención de sus mascotas, y demandan una atención más específica y actualizada. Tecnología para diagnósticos precisos El avance de la tecnología y su aplicación médica es fundamental. Así lo Martos: “No solo disponemos de medios diagnósticos más precisos, de imagen avanzada o técnicas diagnósticas novedosas, sino que el número de equipos y su disponibilidad en las diferentes regiones del país es una realidad”. También pueden ofrecer nuevas líneas de tratamiento y la incorporación de un mayor número de personal de elevada formación, como diplomados o acreditados, ayuda a mejorar los resultados, por ejemplo, con la posibilidad de realizar un procedimiento quirúrgico que tiempo atrás era improbable. El empleo de tomografía axial computarizada y resonancia magnética es habitual. “También es cada vez mayor la posibilidad de utilizar procedimientos quirúrgicos de mínima invasión, con el empleo de laparoscopia y toracoscopia, así como otras herramientas emergentes”, destaca el veterinario. En Umavet, desarrollan diferentes áreas para prestar una atención integral oncológica. Colaboran de forma personalizada con los servicios necesarios, desplazándose a otras clínicas, ya que trabajan estrictamente con veterinarios. Entre sus servicios se encuentran, la consulta oncológica especializada, con realización de citologías in situ y entrega de informe médico con recomendaciones terapéuticas; la citología oncológica, con la toma de muestras y primeros resultados in situ; la administración de quimioterapia, a través de diferentes protocolos multifármacos o monoterapia, y la monitorización y el control de efectos secundarios. También cuentan con cirugía oncológica: diferentes tipos de cirugía adaptada a la naturaleza de la neoplasia, manejo y márgenes apropiados. También realizan asesoramiento sobre las pruebas complementarias imprescindibles para una correcta estadificación del paciente, previa a cualquier tratamiento. La inmunoterapia como pilar En los últimos años, la oncología veterinaria ha incorporado nuevos marcadores tumorales que pueden analizarse en muestras histopatológicas mediante tinciones inmunohistoquímicas, en muestras líquidas mediante citometría de flujo o a través de pruebas de clonalidad, lo que ha contribuido a mejorar de forma significativa la precisión diagnóstica. Según Martos, la investigación actual se orienta principalmente al desarrollo de la biopsia líquida, una herramienta que permite obtener un diagnóstico precoz del cáncer o monitorizar la evolución de la enfermedad a partir de una simple muestra sanguínea. “En cuanto a los tratamientos, el avance de la inmunoterapia debe ser el pilar fundamental del futuro avance y mejora de las terapias. Las terapias dirigidas también están en desarrollo constante, y se sigue mejorando la precisión de otras terapias, como por ejemplo en radioterapia”, analiza Martos. “LAS TERAPIAS DIRIGIDAS TAMBIÉN ESTÁN EN DESARROLLO CONSTANTE” “EL EMPLEO DE TOMOGRAFÍA AXIAL COMPUTARIZADA Y RESONANCIA MAGNÉTICA ES HABITUAL” Enfermedades más prevalentes Acorde con el director del Centro Veterinario UmaVet, la prevalencia puede variar en función de diferentes factores como pueden ser la región geográfica o la raza del animal. “En nuestro centro solemos atender numerosos casos de neoplasias linfoproliferativas, tanto linfomas caninos como felinos en sus distintas variantes -multicéntrico, digestivo, cutáneo, nasal...-, así como tumores cutáneos y subcutáneos como mastocitomas, sarcomas de tejidos blandos o carcinomas”, detalla. Asimismo, señala que los tumores mamarios, “aunque su número está disminuyendo, siguen siendo habituales”. También destacan las neoplasias orales -como el melanoma maligno oral canino o el carcinoma de células escamosas felino-, las óseas, como el osteosarcoma canino, y las vasculares, como el hemangiosarcoma.
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