IM VETERINARIA #62

67 Por ejemplo, pueden entrar en contacto con diversas garrapatas y patógenos transmitidos por ellas, como Babesia, Ehrlichia., Anaplasma, Rickettsia, Borrelia, nematodos filarioides y flavivirus. Asimismo, las mascotas podrían ser portadoras de estos patógenos o de garrapatas infectadas. Las garrapatas son enzoóticas en la mayor parte de Europa y su distribución depende de diversos factores, como las condiciones ambientales y la disponibilidad de hospedadores. Los picos de actividad de los parásitos dependen de la ubicación geográfica y de la especie del mismo. Por otro lado, en muchos países se observa actividad durante todo el año, especialmente con el calentamiento global. La transmisión de patógenos propagados por garrapatas en Europa se asocia con mayor frecuencia a la exposición a Dermacentor reticulatus (garrapata adornada de la vaca, garrapata adornada del perro, garrapata de los prados o garrapata de los pantanos), Rhipicephalus sanguineus (garrapata marrón del perro, garrapata de las perreras o garrapata pantropical del perro), Ixodes ricinus (garrapata del ricino, garrapata de las ovejas o garrapata del ciervo) e Ixodes hexagonus (garrapata del erizo). Otro subbloque alerta sobre parásitos transmitidos por dípteros (tales como la Dirofilaria, Leishmania, Thelazia callipaeda, Onchocerca lupi). Cuando de ellos se trata, se debe tener en cuenta, igualmente, la presencia de varios gusanos filarioides, enzoóticos en Europa y transmitidos por mosquitos (Culicidae/culícidos) en perros y gatos que se desplazan entre países, da igual si esa enfermedad está presente de manera continua en esa zona geográfica o no. El documento menciona a este respecto a los gusanos filarioides, nemátodos que infectan el tejido conectivo y el sistema vascular de perros y gatos. Dirofilaria immitis, el gusano del corazón canino y felino, es la especie más patógena, mientras que la Dirofilaria repens, que causa principalmente dirofilariosis subcutánea, es la especie más importante responsable de infecciones zoonóticas por Dirofilaria en Europa. Este nematodo infecta principalmente a cánidos, pero también puede infectar a otros mamíferos, en particular a hurones y gatos. Es enzoótica en el sur y partes del este de Europa y es una causa importante de enfermedad cardiorrespiratoria grave en perros y gatos. En raras ocasiones, se han reportado granulomas parasitarios en los pulmones, similares a un tumor pulmonar, debidos a larvas migratorias aberrantes de D. immitis en humanos en diferentes países europeos. Foco en la leishmaniosis La lista de parásitos de los que advierte el ESCCAP es larga, pero hay uno que merece especial mención por su popularidad: la leishmaniosis, causada por parásitos protozoarios intracelulares del género Leishmania, siendo Leishmania infantum la especie predominante en perros y gatos del sur de Europa. La transmisión se produce principalmente a través de picaduras de flebótomos (mosquitos de arena). Se han descrito otras vías de transmisión no vectoriales en zonas no enzoóticas, como la vertical, la venérea (principalmente de macho infectado a hembra) y la transfusión sanguínea. Estas vías alternativas explican la aparición de casos esporádicos en perros que nunca han viajado fuera de zonas no enzoóticas (casos autóctonos reales). La leishmaniosis tiene potencial zoonótico y actualmente se cree que se produce exclusivamente a través de picaduras de flebótomos. La leishmaniosis canina es enzoótica en el sur de Europa, con tasas de prevalencia de la infección de hasta el 60 % en poblaciones expuestas mediante diagnóstico serológico. Las cifras de la guía muestran el límite norte aproximado del territorio donde está presente de forma constante y habitual en la población animal, sin que se extienda de forma epidémica. Fuera de esta zona, se han diagnosticado y tratado numerosos casos importados de leishmaniosis canina y algunos casos en gatos. Sin embargo, cada vez hay más informes de infecciones aisladas en perros que no han transitado ni residido en zonas enzoóticas, así como de transmisión entre perros en zonas enzoóticas sin flebótomos. Lo más probable es que la transmisión focal pueda ocurrir durante un período limitado si existe suficiente presión infecciosa procedente de perros infectados importados en ausencia de vectores competentes a través de estas vías no vectoriales. La guía dedica también unos párrafos a los parásitos transmitidos a través de la depredación y el consumo de carne/despojos crudos. De estas infecciones, la más importante en Europa es la tenia del zorro, E. multilocularis, causante de la equinococosis alveolar en humanos. Se trata de una zoonosis grave y además se ha propagado rápidamente por el continente europeo en los últimos 20 años. La tenia adulta es transmitida por zorros, perros mapaches, otros cánidos salvajes y, en raras ocasiones, por perros y gatos. Los zorros actúan como reservorio de la infección y los ratones de campo microtinos como hospedadores intermediarios. Los animales se infectan por la depredación de estos roedores, y la infección en poblaciones urbanas de zorros y perros acerca el parásito a las personas. Por su parte, los gatos pueden actuar como hospedadores definitivos de E. multilocularis, pero presentan una menor carga de parásitos y una menor fecundidad que los cánidos. “LOS VETERINARIOS Y PROPIETARIOS DE MASCOTAS DEBEN TOMAR MEDIDAS PARA PROTEGERLAS DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS”

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