IM VETERINARIA #45

49 im veterinaria Conversamos con Belén Montoya, veterinaria especializada en medicina felina y fundadora de la clínica Pensando en Gato, sobre los principales cuidados y enfermedades de estos animales. En cuanto a afecciones, señala que todo depende de los pacientes que suelan acudir a la clínica, por lo que la prevalencia de las patologías variará significativamente. “En mi caso, al dedicarme exclusivamente a casos complejos y segundas opiniones, lamayoría de mis pacientes suelen ser sénior y geriátricos, los cuales presentan patologías de tipo crónico, entre ellas procesos digestivos como enfermedad intestinal inflamatoria y linfoma de bajo grado, pancreatitis, hepatopatías, alteraciones hematológicas, problemas respiratorios de vías altas y bajas y alteraciones nefrourinarias”, explica. Enfocarse en el diagnóstico Belén Montoya cree que, a veces, se tiende a sobremedicar bastante a los gatos, “y ya es complicado medicar a un gato de por sí”. Por esto, opina que lo correcto es enfocarse en el diagnóstico, “de esta forma daremos la medicación precisa en base a lo que necesite ese paciente, evitando que el vínculo gato-humano se deteriore. Y preguntar, antes, cómo responde ante la toma de medicación, dar alternativas, explicar cómo hacerlo, remarcar qué tiene que tomar sí o sí, la duración, etc. A veces corremos el riesgo que el propietario ‘colapse’ y no le dé nada debido a estos u otros factores”. Por otro lado, la veterinaria especifica que se olvida con frecuencia que el dolor está presente detrás de muchos de los signos que tienen los gatos, asociados a la patología de base o a otras, “con lo que, en este caso, el diagnóstico y control del dolor debería estar todavíamás integrado en las primeras consultas del gato enfermo”. El día a día en una clínica de medicina felina En Pensando en Gato, la clínica de Belén Montoya, se combina la consulta presencial de pacientes felinos en Valencia y Madrid con la formación a veterinarios, tanto online como presencial, “más la conciliación familiar, pues cuando solo somos dos adultos sin ayuda familiar, es realmente complicada, así que ningún día es igual”. Los días más intensos de trabajo, normalmente, la veterinaria arranca definiendo lo más importante del día y luego comienza preparando charlas, materiales o redactando informes. “Otros días por la mañana tengo sesiones de consultoría o mentoría con colegas veterinarios, y es a lo primero que dedico la primera parte del día”. Un día a la semana acude a realizar ecografías solo de pacientes felinos a un centro en concreto y también intenta dedicar un tiempo a revisar los casos, a estudiar, y un par de días por la tarde acude a las clínicas donde tiene pacientes: “Como soy externa, tengo varios centros colaboradores y suelo tener días fijos, así esmás fácil agrupar varios pacientes en esemismo centro”. Avance en cirugía y otras investigaciones La veterinaria apunta varias líneas en las que se está trabajando, y que, cada vez más, auguran una revolución en la medicina felina. “Se está profundizando en el comportamiento felino, sus necesidades como especie, como individuo... Cada vez los conocemos mejor y ya hay publicaciones científicas sobre muchos detalles que, los que llevamos muchos años siendo especialistas de los gatos, sabíamos por pura intuición”. Todo ello sirve de herramienta para los tutores y los veterinarios, “de forma que podamos hacer que su bienestar en casa sea mayor, reducir el estrés dentro de la clínica, saber cuándo presentan dolor, prevenir patologías antes de que sucedan... Así que, para mí, es un gran avance la investigación en este sentido”. Montoya apunta que es increíble todo lo que se está profundizando en todos los mecanismos biológicos de muchas enfermedades, tanto en procesos digestivos como en las enteropatías, neoplasias, en el envejecimiento celular en pacientes renales, en estudios del bioma, en patologías cardíacas... “Gracias a estas investigaciones podremos llegar a comprender dónde está la base del problema, predecir factores de riesgo y, por supuesto, llegar a terapias definitivas en algunas enfermedades que antes eran incurables, como la cardiomiopatía hipertrófica, por ejemplo”. La veterinaria señala el avance de la cirugía de mínima invasión, junto con los avances en diagnóstico y control del dolor en pacientes felinos, que “son una combinación perfecta para todos aquellos gatos que presenten dolor crónico o necesiten intervenciones quirúrgicas”. Especialización: trabajar con pacientes felinos Según Montoya, la especialización es necesaria: “Necesitamos muchos más colegas que solo se dediquen a los gatos, que los entiendan, que empaticen, que estudien solo de gatos y que se impliquen con estos pacientes tan maravillosos”. La veterinaria les anima a que se formen (hay varios postgrados a nivel de España y también internacionales), que elijan el que más les conviene, que estudien mucho, que sean autodidactas y críticos, y que visiten centros que trabajen bien con gatos y la medicina felina, “para tener un enfoque mucho más cercano a lo que es trabajar con pacientes felinos de forma excelente”. “Se está profundizando en el comportamiento felino, sus necesidades como especie... Cada vez los conocemos mejor” “El diagnóstico y control del dolor debería estar más integrado en las primeras consultas del gato enfermo”

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