IM VETERINARIA #32

25 im veterinaria cambio en la actitud hacia las compras online, observándose un desplazamiento de las compras de alimento para mascotas en puntos de venta tradicionales hacia puntos de venta online, aunque esto no se aplica a los tratamientos. Por lo que se refiere a la actitud hacia el cuidado futuro de las mascotas, también el Covid-19 parece haber cambiado la percepción de los propietarios, ya que se observa que el con- finamiento puede haber aumentado la conciencia del propie- tario sobre la importancia del bienestar y la prevención. En ese sentido, según los datos de la encuesta, el 77% de ellos intentarán mejorar el bienestar de su mascota, el 74% afirma que prestará más atención a las recomendaciones de su ve- terinario y el 72% señala que intentará pasar más tiempo con sus mascotas. Nuevas formas Una de las transformaciones que más se han percibido en la so- ciedad a raíz de la llegada de la pandemia ha sido la irrupción de las tecnologías, enfocadas principalmente al teletrabajo por imperativo sanitario. En general, la telemedicina continúa siendo poco común en la mayoría de los mercados europeos, y es aún más rara en el caso de las consultas veterinarias. Según la encuesta, el 41% de las personas han utilizado teleconsultas para ellos mismos o su fa- milia, y apenas el 13% las han usado para sus mascotas, aunque el 95% de los que la han utilizado con el veterinario están con- tentos con ella. Hay un gran desconocimiento de este servicio. El 61% de los encuestados no sabe si su veterinario lo ofrece. De los resultados de la encuesta se puede extraer que hay in- terés general en las teleconsultas, pero que es mayor concre- tamente en algunos perfiles, como aquellos propietarios que tienen varias mascotas, son personas jóvenes, mayoritaria- mente menores de 35 años, con empleo e ingresos por encima de la media, que tienen un seguro y su mascota está a dieta. Entre los beneficios percibidos en esta variedad de consulta veterinaria, el mayor es el hecho de no tener que ir al centro veterinario, en un 59% de los casos. Además, se señala el aho- rro de tiempo (43%) y que resulta menos estresante para la mascota, algo que afirma el 33%. En cuanto a las limitaciones percibidas en este tipo de atención, el 65% argumenta que no se puede reemplazar el contacto cara a cara, y el 55% ha- bla de la falta de pruebas diagnósticas. El 30%manifiesta que no se puede iniciar el tratamiento sin una visita a la consulta. Se puede concluir que, aunque la teleconsulta no va a reem- plazar las citas presenciales con un veterinario, en algunas circunstancias puede tener un papel que desempeñar. La telemedicina La sanidad, tanto humana como veterinaria, ha tenido que adaptarse a nuevas maneras de traba- jar. Los veterinarios no han sido menos y, durante estos meses, muchos han implantado la teleme- dicina en sus centros para poder atender a sus pacientes. Desde la Federación Europea de la Veterinaria (FVE) han presentado recientemente un mani- fiesto en el que recuerdan que la telemedicina no reemplaza a los veterinarios, sino que debe servir para complementar otros métodos para hacer una consulta o hacer un diagnóstico. Asimismo, independientemente de las herramientas que se utilicen, los veterinarios siempre son plenamente responsables de los servicios profesionales que brindan. La telemedicina veterinaria utiliza las TIC para superar barreras geográficas y aumentar el acceso a los servicios de salud. De esta manera, los veterinarios pueden intercambiar datos e in- formación más eficazmente entre ellos. Para los clientes, esto les permite acercarse a su veterinario desde un lugar remoto en búsqueda de consejo. Sin embargo, la FVE considera necesario que los organismos reguladores establezcan los casos en los que el diagnóstico y la consultoría se pueda lle- var a cabo remotamente. Asimismo, para evitar el mal uso de la telemedicina, los veterinarios deben estar sujetos a obligaciones éticas y legales en el uso de telemedicina. Para la FVE, la telemedicina se basa en cuatro pilares: consulta remota, diag- nóstico remoto, receta remota y datos médicos generados por terceros. Finalmente, la Federación reconoce la importan- cia de las herramientas digitales para ofrecer ser- vicios de buena calidad. Recomienda, así, a sus miembros que permitan el uso de la telemedicina en el contexto de una relación veterinario-clien- te-paciente (VCPR) mediante el establecimiento de procedimientos operativos estándar, códigos de conducta y regulaciones proporcionadas que respeten la misión de los veterinarios de promo- ver la salud y bienestar animal, salud pública y protección del medio ambiente mediante la pres- tación de servicios de alta calidad. El confinamiento puede haber aumentado la conciencia del propietario sobre la importancia del bienestar y la prevención