IM VETERINARIA #20

32 im veterinaria “La directiva europea en vigor establece que el veterinario es un profesional generalista, por tanto pluricompetente en todos los campos de la profesión y, por ello, el título de grado no pue- de salirse de esa concepción ”, destaca Corbera. Para este, sin embargo, “no debemos engañarnos y, aunque la formación del grado en veterinaria no garantiza una formación de alto nivel en ninguno de sus campos, sí permite formar un profesional con una visión global de la profesión que le permite solucionar pro- blemas de la sociedad en distintos campos”. Esa, en su opinión, “es una de las fortalezas que ofrece nuestro título y ha sido re- marcado reiteradamente por los empresarios cuando contratan a nuestros egresados en campos no tradicionales”. La especialización, a debate Corbera también señala que “ son los títulos de máster los que deben enfocarse a esa especialización y cada facultad debe proveer de una formación en aquellos campos en los que destaca” . Y prosigue: “Creemos que la universidad debe proveer estos estudios de máster como el primer paso en la es- pecialización, denominada especialización de primer nivel (en Seguridad Alimentaria, Clínica Veterinaria, Sanidad Animal, Producción Animal, etc.). La de segundo nivel es aquella reser- vada a un campo de la profesión más específico aún. Hoy en día son pocos los veterinarios que tienen la opción de alcan- zar este máximo grado de especialización, sin embargo en los próximos años asistiremos a una creciente demanda de este tipo de profesionales”. Respecto a cómo ha influido la progresiva proliferación de especialidades y centros de referencia en la práctica veteri- naria, Corbera afirma que “es precisamente la existencia de especialistas lo que ha generado más actividad científica ba- sada en la evidencia dentro de los servicios profesionales pres- tados y que la sociedad demanda cada vez más”. El decano insta asimismo a los colegios europeos de especialistas “a hacer un esfuerzo mayor para aumentar el número de progra- mas formativos, de forma que este máximo nivel de especia- lización sea cada vez más una realidad en nuestra profesión”. A modo de ejemplo, nos ilustra el decano, hoy en día en pequeños animales solo hay ocho veterinarios diplomados en Medicina Interna Veterinaria o siete en Cirugía en Espa- ña. Para Corbera, los números “son claramente insuficientes para garantizar una oferta adecuada de especialistas para nuestra sociedad”. Sin embargo, el decano se muestra opti- mista: “En los próximos años asistiremos a una progresión al “Somos una gran familia en la que entre todos cuidamos mucho de nuestros alumnos y nos esforzamos porque salgan con la mejor preparación posible” alza del número de especialistas y por eso animamos a nues- tros egresados a seguir esos programas formativos ya que van a ser los que vengan a la universidad a poner en marcha esos programas en un futuro muy próximo”. Factor innovación La sanidad es uno de los sectores que registran un grado más alto de innovación, tecnificación y robotización, tan- to en humana como en veterinaria. En veterinaria, señala Corbera, se practica “ la actividad científica basada en la evi- dencia y en cualquiera de los campos de la profesión se están incorporando nuevas tecnologías que vienen a mejorar y mo- dificar la forma en la que trabajamos día a día”. Las nuevas tecnologías de la información y la comunicación han faci- litado la adquisición de conocimientos por parte de profe- sorado y alumnado y, a modo de ejemplo, el decano afirma estar asistiendo “a la impresión en 3D para generar modelos que los estudiantes puedan utilizar para su aprendizaje; el uso de imágenes y videos que hasta hace unos años eran un recur- so limitado y que hoy facilitan el aprendizaje de muchas téc- nicas quirúrgicas que antes teníamos que explicar utilizando láminas o dibujos antes de verlas in-vivo; nuevos programas informáticos que nos facilitan el trabajo en el día a día y, por supuesto, la información que disponemos en internet para el aprendizaje no debe minusvalorarse”. La Universidad de las Palmas de Gran Canaria tiene firma- dos asimismo convenios de colaboración con empresas lo- cales, nacionales e internacionales. Ello es fruto del propio clamor popular que hubo en la universidad ya en 1989. Es por ello que existe un vínculo entre la universidad y el te- jido productivo canario. “Desarrollamos muchos proyectos con empresas, asesoramiento y desarrollo de servicios para la mejora de la sociedad y para ello contamos con la Fundación Parque Científico-Tecnológico, en la que se integran unidades como el Servicio General de Investigación Animalario experi- mental, que gestiona también la granja, o el propio Hospital Clínico Veterinario de la Facultad” , apunta Corbera.

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