IM VETERINARIA #14

42 im veterinaria leran el desgaste del cartílago”, explica. Añade a continuación que el control de la obesidad es fundamental: “Un exceso de peso combinado con una musculatura insuficiente aumenta la fuerza que soportan las articulaciones y, por lo tanto, un mayor y temprano deterioro”. Por otra parte, para contribuir a mantener el cartílago en bue- nas condiciones, recomienda una dieta rica en ácidos grasos omega 3 con suplementos como colágeno hidrolizado, con- droitín sulfato, glucosamina y ácido hialurónico. “Corregir tempranamente alteraciones anatómicas e incongruencias o defectos de eje que puedan hacer que la articulación tenga ro- zamientos inadecuados en el movimiento ayudará a retrasar la aparición de degeneraciones articulares”, apunta. Sumar tratamientos Preguntado por los tratamientos más eficaces, responde Die- go López Nájera que en general, “en cada patología articular podemos escoger entre más de un tratamiento o sumar varios”. Revela que los tratamientos quirúrgicos son inevitables en fracturas de huesos o de ligamentos, luxaciones e incongruen- cias provocadas por displasias, y “contamos con numerosas téc- nicas quirúrgicas para escoger”. Decidirse por una como la más eficaz es misión imposible: “Cualquier tratamiento que consiga la curación es una buena elección”. En general, trata de seguir un criterio de mínima invasión. “Entre varias técnicas quirúrgicas con resultados clínicos similares suelo escoger la menos agresiva y la que menos implantes deje en el cuerpo del paciente”, matiza. Artroscopia y factores de crecimiento En cuanto a novedades en artrología veterinaria, la artroscopia le parece el avance más notable a nivel de diagnóstico. “Susti- tuye a la artrotomía exploratoria y permite diagnosticar y tratar a la vez, incluso patologías poco diagnosticadas en el pasado próximo”. Sin embargo, ase- gura que tiene limitaciones, debido al tamaño de algunas articulaciones y la larga curva de aprendizaje de la técni- ca, trabas que podrían verse resueltas con “la aparición de nuevas ópticas con mayor amplitud de campo de visión y menor diámetro”. En lo que respecta a trata- mientos farmacológicos, que hasta ahora se han centrado en antiinflamatorios, princi- palmente no esteroideos (AI- NES), López Nájera sostiene que ahora se sigue con ellos intentando no interferir en las propiedades homeostáticas del organismo para proteger órganos como los riñones, el hígado o el estómago. En su opinión, “no existe un mejor AINE; diferentes pacientes respon- den de forma distinta a un mismo aine para idéntica patología. Se trata de encontrar el más adecuado para nuestro paciente en particular, y no siempre será la misma molécula”. Y no deja de lado el papel cada vez más relevante de la reha- bilitación y la fisioterapia en el tratamiento de las patologías articulares. Al respecto comenta que “la electroestimulación, el tens, la laserterapia, las ondas de choque, la aplicación de cam- pos electromagnéticos, etcétera, ayudan de forma determinante a la recuperación”. Sin embargo, en su opinión, el avance más significativo en tratamiento son las nuevas terapias regene- rativas con factores de crecimiento y células mesenquimales, que “marca un apasionante camino para tratar lesiones articula- res de forma no agresiva”. En concreto, alude a los diferentes estudios clínicos que apo- yan el uso de plasma rico en factores de crecimiento para mejorar la angiogénesis y la proliferación celular, y que de- muestran su eficacia para tratar ciertas lesiones del cartílago articular. Señala que en el Instituto Veterinario de Ortopedia y Traumatología (IVOT) cuentan con numerosos casos tratados, constatando que tras la aplicación de plasma rico en factores de crecimiento intraarticulares, “observamos un triple efecto be- neficioso: analgésico, reparador y mejoría a nivel funcional, ade- más de una reducción en el tiempo de reparación de las lesiones intraarticulares”. Tratamientos bio-regenerativos Cuando se fracasa en el intento de salvar una articulación, a menudo el veterinario se ve obligado a sustituirla por una prótesis o a realizar una artrodesis. Ante éstos y otros tratamientos en traumatología que, en opinión de López Nájera, “siguen siendo demasiado agresivos”, cualquier esfuerzo dirigido a reparar y regenerar el cartílago ar- ticular supone una puerta abierta para prolongar la vida de una articulación y mejorar la calidad de vida del animal. Acorde con ello, el doctor, que colabora con un equipo multidisciplinar en la Fundación García Cugat para la investigación biomédica o de tratamientos bio-regenerativos, explica que las células madre mesenquimales del te- jido adiposo “tienen un potencial de diferenciación hacia cartílago y se utilizan en el tra- tamiento de la osteoartrosis en el perro por su efecto inmunomodulador, antiinflamatorio y condrogénico”. Según comenta, varios estudios realizados con plataformas de fuerza evidencian una mejoría en perros con osteoartrosis en la cadera tratados con células madre mesenquimales derivadas de grasa. Además, matiza que estas células, unidas a plasma rico en factores de crecimiento en aplicaciones intraarticulares (de articulacio- nes con osteoartrosis), favorecen notablemente la recuperación. “El plasma rico en factores de crecimiento ofrece mejoría funcional y reduce el tiempo de reparación de las lesiones intraarticulares”

RkJQdWJsaXNoZXIy NTI5ODA=