Nuestro siguiente entrevistado es ya un auténtico experimentado en la veterinaria. No en vano, Miguel Varela lleva más de 30 años en la profesión. Actualmente, está al frente de dos clínicas, Centro Veterinario Pontevedra y Centro Veterinario San Miguel. "Mi dedicación casi exclusiva es la cirugía, y trabajamos con casos propios y remitidos de otros compañeros".

¿Qué es para ti la labor veterinaria? "Es una forma muy especial de entender la salud animal y de las personas que convivimos con ellas". Y es que el principal reto de la medicina veterinaria es alcanzar el concepto de una salud de manera universal, la que compete a los animales, las personas y el medio ambiente. Si tiene que resaltar algo de la veterinaria más moderna, Miguel Varela destaca la superespecialización, "cada vez hay más profesionales y mejor formados", la capacitación de las clínicas y la evolución de las técnicas: "El diagnóstico por imagen, por ejemplo, nos ha facilitado mucho nuestra tarea, ya que permite programar con más precisión los procesos quirúrgicos".

Miguel Varela cuida y mima mucho la relación y la comunicación personal con los propietarios. "Me gusta tratar con los tutores de los animales para mantenerles bien informados de los procedimientos que se van a realizar. Disfruto con el trato de las personas y me gusta que éstas se sientan seguras y confiadas", nos explica. Sin embargo, no todo es color de rosa, también la gestión requiere esfuerzo y dedicación, muchas veces requiere tiempo del que no se dispone. "La gestión es una tarea muy ardua y difícil, pero al mismo tiempo ilusionante. Me gusta hacer reuniones de trabajo en las que exponer los distintos criterios de cada uno de nosotros y así hacer una gestión más creativa y plural".

¿Cómo ser sostenible en un entorno altamente competitivo? "La sostenibilidad de las clínicas veterinarias pasa por una muy buena gestión de las mismas. Hay que tener muy claro cuáles son tus fortalezas y potenciarlas", asegura Miguel Varela, y continua: "Deben de coexistir los grandes hospitales, las clínicas de especialidades, y pequeñas y variadas clínicas de barrio. Y entre todas saber colaborar para salir reforzados".

Y es que la profesión veterinaria tiene mucho que aportar a la sociedad: "Hay una labor enorme de concienciación por la salud y el bienestar animal que repercute en la calidad de vida de los ciudadanos". Este experimentado veterinario aboga por equipos multidisciplinares. "Deberíamos colaborar en proyectos interdisciplinares con otras profesiones de la salud como médicos, fisioterapeutas, etc. Está demostrado el beneficio de los animales en la salud de las personas".

Para Miguel Varela, el concepto One Health trata de adaptarse a las relaciones cambiantes causadas por la globalización, las migraciones y la mayor movilidad de las personas. "Hay muchas enfermedades zoonóticas, y el proceso de transmisión y transporte va en aumento", comenta.

Puedes leer el artículo completo en el PDF adjunto.