En la Comunidad Valenciana, se han habilitado ocho clínicas veterinarias para llevar a cabo análisis de triquinosis en piezas de caza silvestre y matanzas domiciliarias destinadas al consumo privado. Esta medida responde a la necesidad de controlar la presencia del parásito Trichinella, causante de la enfermedad parasitaria zoonótica conocida como triquinosis.

Tradicionalmente, el Centro de Calidad Avícola de la Comunitat Valenciana (CECAV) era el único lugar oficial para realizar estas pruebas en la región. Sin embargo, el Consell Valencià de Col.legis Veterinaris (CVCV) y la Conselleria de Sanitat Universal han trabajado en conjunto para ofrecer soluciones a los cazadores, ampliando así la disponibilidad de los análisis.

Desde 2015, la normativa comunitaria exige que los análisis de triquinosis se realicen utilizando el método de digestión, en lugar del tradicional triquinoscopio. Esta actualización normativa se produjo después de la detección de un caso de triquina que no podía ser detectado con el método anterior. El nuevo método requiere equipos especializados y conocimientos específicos, así como una certificación del CECAV según la regulación autonómica.

Para facilitar el cumplimiento de las regulaciones y garantizar la seguridad alimentaria, el CVCV ha suscrito convenios con la Federación de Caza de la Comunidad Valenciana, permitiendo a los cazadores realizar los controles de las piezas cobradas. Además, los colegios de veterinarios han capacitado a los profesionales para ajustarse a los procedimientos normativos.

En diciembre de 2022, se estableció un convenio con la Conselleria de Sanitat Universal para regular las condiciones de los análisis de triquinosis y ampliar la oferta de laboratorios habilitados. Actualmente, se han habilitado ocho centros en las provincias de Alicante, Valencia y Castellón, los cuales han invertido en equipos conforme al método de referencia según la Norma ISO 18743. Estos centros cuentan con veterinarios capacitados para la toma de muestras y realización de las pruebas, y han pasado exitosamente por programas de control por parte del CECAV.

El proceso de certificación sigue abierto, lo que podría llevar a la habilitación de más centros en los próximos meses. Esta medida amplía las opciones para los cazadores y contribuye a garantizar la seguridad alimentaria al controlar la presencia de Triquina en las piezas de caza silvestre en la Comunidad Valenciana.