Hacia la reducción sustancial de las ventas de antibióticos veterinarios en animales

La resistencia a los antimicrobianos es uno de los principales problemas sanitarios existentes en la actualidad. Las ventas totales en mg/PCU del consumo de antibióticos veterinarios ha disminuido considerablemente desde 2021. De la misma manera, se observa una reducción de las ventas de cefalosporinas, quinolonas y polimixinas de tercera y cuarta generación.

07/02/2023

Diversas organizaciones internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) lo tienen claro: "La resistencia a los ...

Diversas organizaciones internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) lo tienen claro: "La resistencia a los antimicrobianos (RAM) es una amenaza para los seres humanos, los animales, las plantas y el medio ambiente. Nos afecta a todos. La lucha contra la resistencia a los antimicrobianos es un esfuerzo verdaderamente global y debe abordarse a través de un enfoque de One Health".

Para frenarlo de manera efectiva, todos los sectores deben aunar esfuerzos y fomentar el uso prudente de los antimicrobianos, así como las medidas preventivas. Fortalecer la prevención y el control de infecciones en los establecimientos de atención de la salud, las granjas y las instalaciones de la industria alimentaria, garantizar el acceso a vacunas, agua limpia, saneamiento e higiene, implementar las mejores prácticas en la producción de alimentos y agricultura y garantizar la gestión adecuada de los desechos y aguas residuales de las industrias relevantes son "aspectos esenciales para reducir la necesidad de antimicrobianos y minimizar la aparición y transmisión de las resistencias a los antimicrobianos".

El informe anual de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) sobre la Vigilancia Europea del Consumo Veterinario de Antimicrobianos (ESVAC) en 31 países europeos, con fecha de 18 de noviembre de 2022, coincidiendo con el Día Europeo para el Uso Prudente de los Antibióticos, que recoge las tendencias que van de 2010 a 2021, muestra que, en la última década, hemos reducido sustancialmente las ventas de antibióticos veterinarios en animales.

En concreto, las ventas generales de antibióticos veterinarios disminuyeron en el período 2011-2021, de acuerdo con los datos de 25 países que proporcionaron información continuamente, un 46,5%, alcanzando el valor más bajo jamás informado, de 161,2 mg/PCU a 86,2 mg/PCU. Todo ello, a pesar de un modesto aumento de las ventas en 2014 y 2020, y reducciones más moderadas en los últimos años.

Las ventas de la mayoría de las clases de antibióticos se han reducido significativamente desde 2011, con la bajada de las ventas de las tres clases de antibióticos de mayor venta: tetraciclinas (63,4%), penicilinas (24,1%) y sulfonamidas (53,8%), contribuyendo, en gran medida, a la reducción general de las ventas totales. Las ventas de cefalosporinas de tercera y cuarta generación cayeron un 38%, las polimixinas un 80% y las fluoroquinolonas un 14%. Las ventas de otras quinolonas cayeron un 83%. Hay que recordar que estos antibióticos deben usarse con prudencia y responsabilidad para preservar su eficacia y mitigar el riesgo potencial para la salud pública, como se indica en la categorización del Grupo de expertos ad hoc sobre asesoramiento antimicrobiano (AMEG). Desde 2019, las penicilinas han superado a las tetraciclinas como la clase de antibióticos de mayor venta.

La proporción de las ventas de envases pequeños de polvos y soluciones orales suficientes para el tratamiento de un único animal o unos pocos animales es bajo en comparación con el de las ventas de los aptos para el tratamiento en grupo. Así, los datos presentados en este informe sobre ventas de polvo oral, soluciones orales y premezclas se consideran estimaciones razonables de ventas de antibióticos VMP para el tratamiento grupal. Aunque las ventas agregadas de los 25 países de formas de productos predominantemente destinadas al tratamiento en grupo disminuyeron un 49,5% entre 2011 y 2021, todavía representaron la mayoría de las ventas en 2021 (87% del total de las ventas). Desde 2017, las soluciones orales superaron a las premezclas como la forma de producto más vendida.

Las tendencias varían entre los diferentes países informantes. Por ejemplo, en 2021, las ventas totales de antibióticos VMP para animales destinados a la producción de alimentos oscilaron entre 2,5 mg/PCU y 296,5 mg/PCU en los 31 países que informaron de datos a ESVAC. La variación entre países se puede explicar, en parte, por diferencias en la composición de la población del animal, la incidencia de enfermedades, los sistemas de producción, las prácticas de prescripción, las dosis diarias utilizadas para los diversos agentes antimicrobianos y as formas farmacéuticas, así como la duración del tratamiento. Además, las diferencias entre países en la selección de proveedores de los datos de ventas pueden tener un impacto en los resultados, aunque se cree que esto es un problema menor.

El aumento que hubo de ventas en 2020 se justifica por la compra excesiva de VMP debido a la incertidumbre en torno a la situación del mercado de medicamentos generada por la pandemia de la Covid-19 y el Brexit, combinada con una sobreestimación de las ventas en algunos países causada por la doble presentación de informes. Por otro lado, la disminución de las ventas observada en 2019 se explica, en parte, por el subregistro, el desabastecimiento, los cambios en los sistemas de recolección de datos o las disminuciones en las ventas de clases específicas de antibióticos. En 2021 se revirtió el aumento de las ventas y las ventas totales alcanzaron niveles inferiores a los registrados para 2019. Es posible que la pandemia de la Covid-19 haya influido de manera específica en cada país en el aumento de las ventas en 2020, que aún se observa a pesar de las correcciones históricas de doble reporte. Por ejemplo, varios de los países que informaron para ESVAC indicaron que los eventos de almacenamiento relacionados con la pandemia podrían ser responsables del aumento de ventas en 2020 y la posterior disminución en 2021. Las ventas de clases de antibióticos consideradas de importancia crítica en la medicina humana igualmente se redujeron notablemente y representaron sólo el 5,5% de las ventas totales en 2021.

"Los resultados positivos reflejan los esfuerzos de los veterinarios, los ganaderos y la industria farmacéutica para reducir el uso de antibióticos para prevenir la resistencia a los antimicrobianos. También muestra que las iniciativas políticas de la Unión Europea (UE) y las campañas nacionales que promueven el uso prudente de antibióticos en animales están teniendo un impacto positivo", señaló Ivo Claassen, jefe de la División de Medicamentos Veterinarios de EMA.

`De la granja a la mesa´

El documento de ESVAC incluye, por primera vez, información sobre el progreso realizado hacia el objetivo de la estrategia Farm to Fork (De la granja a la mesa) de la Comisión Europea para reducir la venta de antimicrobianos para animales de granja y acuicultura en la UE. En so lo tres años, entre 2018 y 2021, los 27 Estados miembros de la UE ya han logrado una reducción del 18% (actualmente en 96,6 mg/PCU), aproximadamente un tercio del objetivo de reducción del 50% fijado para 2030. Esta estrategia Farm to Fork tiene como objetivo hacer que los sistemas alimentarios sean justos, saludables y respetuosos con el medio ambiente.

En general, todos estos resultados indican los esfuerzos que se están llevando a cabo, tanto a nivel nacional como de la UE, para reducir el uso general de antimicrobianos VMP en animales productores de alimentos. Las campañas nacionales para el uso responsable y prudente de antibióticos en animales, la restricción del uso de ciertos antimicrobianos en animales destinados a la producción de alimentos, las medidas de control de prescripción y la sensibilización lograda por las campañas, entre otras iniciativas, han tenido éxito en la mayoría de los países europeos participantes. Eso sí, el último informe anual ESVAC advierte de que los esfuerzos para mantener esta tendencia descendente deben mantenerse y reforzarse para que el objetivo de la Estrategia Farm to Fork sobre antimicrobianos se alcance en 2030.

En el mismo día en el que se publicaba este informe anual ESVAC; Carolina Darias, ministra de Sanidad, inauguraba la jornada para el uso prudente de los antibióticos `La resistencia antimicrobiana en primera persona´, organizada por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS). Destacó allí que una de sus prioridades es la promoción de un uso prudente de los antibióticos, por sus consecuencias para la salud pública. Por eso, afirmó, es tan importante el trabajo que se está haciendo en España, que ha permitido que nuestro país sea un referente a nivel europeo gracias al impulso del Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN). Recordó, asimismo, que la resistencia a los antibióticos causa miles de muertes al año en Europa y que fue declarada por la OMS en 2020 como una de las diez principales amenazas para la salud pública a las que se enfrenta la humanidad.

El objetivo del PRAN es reducir el riesgo de selección y diseminación de resistencia a los antibióticos y, de esta forma, disminuir su impacto sobre la salud de las personas y de los animales, preservando de manera sostenible la eficacia de los antibióticos existentes. Hemos pasado de ser uno de los mayores consumidores de antibióticos a nivel europeo a posicionarnos como el séptimo país con mayor reducción de consumo de antibióticos en la UE. Desde el año 2014, en el que se aprobó el primer PRAN, España ha registrado una disminución del consumo de antibióticos del 25,5% en salud humana y del 62,5% en sanidad animal.

Poco después, el pasado 29 de noviembre, el Consejo de Ministros aprobó, a propuesta del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y del Ministerio de Sanidad, un real decreto que establece una serie de medidas nacionales para favorecer un uso sostenible de antibióticos en el ámbito de las especies de interés ganadero.

Para el diseño de estas medidas, dicho Ministerio mantuvo diversas reuniones con las comunidades autónomas y los sectores afectados, ya que la resistencia a los antimicrobianos es uno de los principales problemas sanitarios existentes en la actualidad, y ha sido una prioridad para la UE desde que en2011 estableciera un Plan Director de Acción sobre Resistencias Antimicrobianas, que estimuló la puesta en marcha de planes nacionales de actuación.

Posteriormente, en 2020 la Comisión Europea publicó la Estrategia Farm to Fork para un sistema alimentario justo, saludable y respetuoso con el medio ambiente. Y resulta imprescindible plantear la sanidad animal desde la perspectiva One Health, iniciativa global cuya finalidad es garantizar un enfoque holístico a la hora de hacer frente a las amenazas para la salud de los animales, los seres humanos, las plantas y su entorno.

La venta de antimicrobianos en España es superior a la media europea, por lo que el Ministerio considera necesario abordar su uso en las explotaciones ganaderas con urgencia, motivo por el cual, este real decreto forma parte del entramado legislativo recogido en el plan estratégico para la aplicación de la nueva Política Agraria Común (PAC) en España. El real decreto pretende establecer el marco de actuación para conseguir un uso sostenible de antibióticos en todas las explotaciones ganaderas, entre las que se incluyen las de acuicultura, con excepción de las explotaciones de autoconsumo, así como las explotaciones de pequeño tamaño.

El Sistema Informático Central de Control de Prescripciones Veterinarias de Antibióticos (PRESVET) en la actualidad ya permite el conocimiento por parte del ganadero de los datos de consumo de antibióticos en su explotación. Esta información servirá para que los titulares de la explotación y veterinarios sean conscientes de su posición relativa en consumo de antibióticos y tengan tiempo de planificar medidas para reducir el consumo en los casos en los que sea necesario.

Puedes leer el artículo completo en el PDF adjunto.