Eladio Santamaría está al frente de cinco establecimientos veterinarios en Pontevedra. Su proyecto, junto a su socio, es fruto de los más de 30 años de experiencia que lleva en el sector: "Nos ubicamos en una zona geográfica semiurbana con mucha actividad económica de la costa de Pontevedra. En el terreno social, colaboro con el Colegio Oficial de Veterinarios de Pontevedra como presidente de la comisión deontológica".

Este experimentado veterinario dedica la mitad de su jornada a la gestión empresarial, y la otra mitad, a su función como veterinario clínico especializado en cirugía y en diagnóstico por imagen. "La veterinaria ha avanzado muchísimo en la gestión empresarial", valora, y continúa: "Hoy día, contamos con profesionales muy buenos que ejercen su actividad como gestores externos y como formadores, aportando un valor añadido al sector".

No obstante, la formación continuada y la experiencia han generado una comunidad de especialistas que ayuda a mejorar la calidad del servicio veterinario tanto en el diagnóstico como en los tratamientos. Así lo cree Eladio Santamaría: "Las transformaciones sociales y económicas mundiales han cambiado la visión de nuestra profesión como negocio para adaptarnos a nuevas circunstancias". Asimismo, la Covid-19 también ha provocado una aceleración de dichos cambios "tanto en la organización del personal y los procesos de trabajo como en la atención al cliente, la cita previa y la visión que debemos transmitir como garantes de la salud en la sociedad".

Para Eladio Santamaría es esencial avanzar en la especialización profesional con una formación oficial de posgrado y colaboración entre hospitales clínicos universitarios y hospitales privados: "El sector también necesita una formación reglada en la gestión empresarial veterinaria, promover la asociación em-presarial y avanzar en el empleo de calidad". Asimismo, considera que "debemos entender qué es lo que busca el cliente en nosotros, qué es lo que le preocupa y cómo podemos ayudarle, para más tarde ofrecerle todas las soluciones posibles con el fin de que pueda tomar la mejor decisión". En definitiva: proporcionar información útil y veraz que genere confianza.

Sin duda, la base de la veterinaria es la apuesta por una medicina de calidad. Pero detrás, hay que asegurar unas condiciones laborales dignas y que al mismo tiempo promuevan la rentabilidad económica con procesos productivos. Un reto, para Eladio Santamaría, no exento de dificultades: "El futuro es responsabilidad de todos empezando por las administraciones públicas, que deben orientar las normas y las leyes para garantizar un mundo saludable y sostenible".

Asimismo, en clave interna, Eladio Santamaría apunta algunos aspectos: "Los veterinarios debemos situarnos en el centro, ofreciendo un ejercicio responsable de nuestra profesión, informando a nuestros clientes, promoviendo la prevención y una tenencia responsable de los animales".

Se despide de nosotros no sin antes poner en valor la praxis veterinaria en el concepto de One Health: "Nuestra labor clínica, sanitaria y de investigación es fundamental para garantizar el bienestar animal, una producción de alimentos de mayor calidad y la defensa del medio ambiente". Y es que: "Sin salud no hay futuro para la humanidad; y sin veterinarios no hay futuro para la salud".

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