Ana García cuenta con una larga trayectoria como veterinaria, y es que, a pesar de su juventud, atesora gran experiencia en España y en el extranjero. Así, después de licenciarse en 2012 por la Universidad Alfonso X el Sabio (UAX), realizó varias estancias en diferentes universidades como Liverpool, Cambridge y Glasgow y trabajó en "general practice" en Newport (Gales) y Birmingham, entre otras experiencias. Hoy es especialista en diagnóstico por imagen en la clínica JC1 Veterinarios. "Mi día a día consiste en realizar estudios radiológicos, además de ecografías; aunque sobre todo me dedico a la parte de imagen avanzada, es decir, tomografías computerizadas (TC) y resonancias magnéticas (RM)".

Buena conocedora del sector a nivel internacional, asegura que el sector de pequeños animales tiene mucha proyección de futuro. "En lo que a mí respecta, cada vez son más los propietarios que quieren implicarse en ofrecerles a sus mascotas lo mejor, y eso conlleva llegar a unos diagnósticos para los que hacen falta técnicas muy avanzadas de imagen que no están disponibles en todos los centros". En este sentido, JC1 Veterinarios cuenta con un aparato de tomografía computerizada de 16 cortes y una resonancia magnética de 0.3 Teslas además de radiología digital indirecta y dos ecógrafos. "Somos un centro de referencia para las demás clínicas de la región, sobre todo en técnicas de imagen avanzada y neurología", afirma Ana García, y continúa: "Con este tipo de pruebas conseguimos conocer las diferentes patologías de una manera mínimamente invasiva, y obtener la mayor información posible antes de tener que realizar procedimientos más complejos".

Pero la técnica no lo es todo... "Los propietarios valoran un trato cercano con el veterinario y que puedan confiar plenamente en él, que se les explique de una manera sencilla y sin tecnicismos lo que le ocurre a su mascota y sus necesidades".

Por tanto, un sector, el de la veterinaria, marcado por una personalización de la atención, pero también por unos profesionales que reivindican mejores condiciones de trabajo. "Es necesaria la creación de un convenio nacional para el sector veterinario donde se especifiquen las diferentes tareas que desempeñamos, además de vigilar el intrusismo laboral y la reducción general del IVA".

Profesionalización y especialización son los elementos esenciales del crecimiento. "Debemos apostar por unos servicios de calidad donde se reduzcan las actividades fraudulentas, además de dar a conocer no sólo las diferentes variantes del mundo de la veterinaria, sino las tareas de llevar a cabo los controles de calidad de los alimentos que consumimos a diario y las inspecciones sanitarias de restaurantes a los que acudimos".

Ana García se despide de nosotros con una propuesta: "Estaría bien que hubiera alguna sociedad benéfica a nivel nacional del tipo del RSPCA en Inglaterra (Royal Society for the Prevention of Cruelty to Animals), una de las organizaciones de bienestar animal más grande del mundo financiada totalmente con donaciones voluntarias, al igual que una concienciación plena de la población".