El artículo "Detection of early renal perfusion changes by contrast-enhanced ultrasonography in dogswith preclinical myxomatous mitral valve disease", publicado por la revista Veterinary Radiology & Ultrasound, señala que la ecografía con contraste en pacientes caninos con degeneración de la válvula mitral permite detectar cambios en la perfusión renal de forma ...
El artículo "Detection of early renal perfusion changes by contrast-enhanced ultrasonography in dogswith preclinical myxomatous mitral valve disease", publicado por la revista Veterinary Radiology & Ultrasound, señala que la ecografía con contraste en pacientes caninos con degeneración de la válvula mitral permite detectar cambios en la perfusión renal de forma más tempranas que otras técnicas, como la ecografía Doppler intrarrenal. Por lo tanto, una detección precoz de estos cambios puede ayudar a frenar la evolución de la enfermedad renal en pacientes cardiópatas.
La enfermedad degenerativa de la válvula mitral es la patología cardiaca más frecuente en perros. Uno de los factores pronóstico que más influye en esta enfermedad es la función renal. Así, la esperanza de vida es menor en perros cardiópatas con enfermedad renal crónica que en aquellos que no tienen problemas renales.
La ecografía con contraste permite evaluar la hemodinámica intrarrenal, ya que permite visualizar la perfusión del lecho microvascular. Esto también constituye una de sus mayores ventajas, ya que permite observar el flujo sanguíneo en vasos de menor calibre que otras técnicas, además de diferenciar la circulación renal cortical de la medular.
Comparando la sensibilidad
El objetivo de este estudio fue evaluar la perfusión renal mediante ecografía con contraste en perros en estadios preclínicos (B1 y B2) de enfermedad degenerativa de la válvula mitral. Los mismos pacientes fueron evaluados mediante ecografía Doppler intrarrenal para comparar la sensibilidad entre ambas técnicas.
En cuanto a la ecografía con contraste, los autores destacaron que la velocidad de perfusión de la corteza renal era más lenta en los pacientes en estadio B2. Esto puede que se debiese a la activación del sistema renina-angiotensina-aldosterona o el sistema nervioso simpático, la cual es frecuente en perros en fases preclínicas de la enfermedad. En estas condiciones, se induce vasoconstricción, especialmente a nivel cortical, lo que reduce el flujo sanguíneo.
Por el contrario, la velocidad de perfusión de la médula renal fue más rápida en dichos perros en estadio B2. Ello pudo ser causado a la derivación intrarrenal de sangre hacia la médula, la cual ha sido documentada en este tipo de pacientes. Sin embargo, este aumento no se ha correlacionado con cambios en la tasa de filtración glomerular.
Sin embargo, al realizar la ecografía Doppler intrarrenal, no se observaron cambios en estos parámetros, lo que sugiere que la ecografía con contraste es más sensible a la hora de valorar la perfusión renal. A su vez, esto permite detectar variaciones tempranas en el flujo renal y facilita el manejo de perros cardiópatas con la finalidad de ralentizar el progreso de la enfermedad renal.
En conclusión, los autores remarcan que la ecografía con contraste permite detectar alteraciones de forma precoz en el flujo renal de perros con enfermedad degenerativa de la válvula mitral en estadio B2, como una disminución en la velocidad de perfusión de la corteza renal y un aumento en la de la médula renal. Esto sugiere que esta es la mejor técnica hasta el momento para detectar de forma precoz cambios en la circulación renal de perros cardiópatas.