El área de diagnóstico por imagen, dentro de la medicina veterinaria, ha evolucionado mucho en los últimos años. De hecho, como señala Raúl Prada, propietario de la Clínica Veterinaria Wecan Prada, los tiempos actuales están marcando la senda de esta innovación. "Cada vez somos y estamos más especializados en las clínicas veterinarias, y esto permite que nos podamos centrar en una rama en concreto dentro de la veterinaria. Todo ello, finalmente, resulta muy beneficioso y positivo tanto para el cliente como para nuestra formación y evolución profesional", detalla. Sobre todo, por la importancia que está tomando el diagnóstico por imagen en los últimos años dentro de la cardiología veterinaria. Esta rama de la clínica veterinaria que se ocupa del estudio del sistema cardiovascular de los animales (formado por el corazón y los diferentes vasos sanguíneos), y de las posibles alteraciones cardiovasculares. De ahí que la cardiología para perros y gatos (así como en otros animales domésticos), sea tan importante, puesto que, gracias a ella, se pueden detectar diferentes anomalías relacionadas con el sistema cardiovascular. "Gracias a la radiología digital y al gran avance en la calidad de los ecógrafos, que nos ofrecen una imagen de calidad e inmediata para la toma de decisiones rápidas, ya sea para diagnósticos, tratamientos, urgencias, hospitalizaciones, revisiones…., podemos tener un mayor conocimiento de la enfermedad que sufre el animal y poder actuar con rapidez".

La Clínica Wecan Prada, situada en Burgos, dispone de la tecnología más novedosa para ofrecer un amplio abanico de opciones a todos sus pacientes. Cuenta con tres salas de consulta, un quirófano y una sala de hospitalización para ofrecer servicios de medicina veterinaria general, medicina preventiva, pruebas diagnósticas y servicios de hospital veterinario de día. Por lo que respecta a las técnicas por diagnóstico en concreto, en Wecan Prada ofrecen radiología digital y radiografía veterinaria (por medio de un equipo de RX con un flat panel que capta la radiación y procesa la imagen con una elevada calidad, gracias a la cual se puede modificar el contraste, aumentar, tomar medidas….); electrocardiografía (con esta técnica es posible ver la actividad eléctrica del corazón, valorando si hay arritmias para evaluar el ritmo cardiaco del animal, de tal manera que se pueda conocer si existen posibles alteraciones o cualquier otra afección cardiovascular); ecocardiografía (que ayuda a valorar cámaras, válvulas, valoración de función sistólica y diastólica, pericardio…Una prueba no invasiva con la que se puede calcular el flujo de la sangre en los vasos sanguíneos y así diagnosticar posibles enfermedades); Doppler tisular (para valorar la función sistólica y diastólica, y que proporciona un análisis cuantitativo de las velocidades de movimiento de las paredes del corazón a lo largo del ciclo cardiaco); y ecografías torácicas (con la que puncionar de una forma eco-guiada y precisa una masa en pulmón, mediastino, drenar un derrame pleural y/o pericárdico, etc.) Así como la medida de la presión arterial oscilométrica (que calcula los valores de la presión arterial mediante un algoritmo, de una forma no invasiva) y pruebas básicas de laboratorio, como hemograma, bioquímica, electrolitos o análisis de orina.

Preocupación y concienciación

Todo un conjunto de pruebas médicas y diagnósticas gracias a las cuales, como nos comenta Raúl Prada, "nos permite tener información más concreta sobre el estado del paciente, por ejemplo, una valoración de la eficacia del tratamiento, un diagnóstico de fallo cardiaco congestivo, derrames, tamponamiento, la hemodinámica del paciente o la toma de medidas y, por supuesto, nos ofrece más posibilidades de poner en marcha un tratamiento intervencionista", concluye.

Y de todos esos servicios de diagnóstico que ofrecen, ¿cuál de ellos es el más sencillo de realizar a las mascotas y cuál es el más complicado?, preguntamos al propietario de la Clínica Wecan Prada. "La verdad es que todos los métodos que ofrecemos son sencillos de realizar porque ninguno es invasivo", apunta. "Quizá el análisis sanguíneo es el menos complicado y el más, la ecocardiografía, porque requiere que el paciente este en una posición en concreto durante un tiempo determinado, además de la interpretación de los cortes y la elaboración del informe. Todo esto lleva un tiempo y contar con una serie de conocimientos para poder practicarlo".

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