Explica Ernesto Larre, PRO & digital director de Royal Canin, que "siempre tratamos de colaborar con proyectos que nos ayuden a hacer realidad nuestro propósito y la Fundación Bocalán representa, sin duda, nuestro compromiso con los animales. Por eso, cuando empezamos a cooperar con ellos y nos dimos cuenta de que el equipo de Royal Canin tenía la oportunidad de participar directamente en esta iniciativa, no lo dudamos", explica Ernesto Larre, PRO & digital director. Así, con los perros de asistencia como grandes protagonistas, un grupo de empleados de Royal Canin ha participado en el proceso de socialización y distintos cuidados de los perros de Bocalán durante su primer año de vida, responsabilizándose del bienestar de estos animales (trabajando factores tan importantes como la socialización o la educación básica), hasta que desde la Fundación consideran que están preparados para realizar su labor. Cabe señalar que la Fundación Bocalán cuenta con un programa de preparación de perros para formarlos como perros de asistencia para niños con autismo (PSNA), por lo que, el pasado mes de marzo, unos días antes de que se celebrara el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo (marcado en rojo el 2 de abril), Zuri, un perro labrador que ya había completado su fase de entrenamiento, conoció a Martín, un niño de 5 años con autismo con el que ha comenzado una vida en común. Aparte de por proyectos tan bonitos como éste, Royal Canin y la Fundación Bocalán colaboran desde hace tiempo en distintos tipos de intervenciones asistidas con animales, con los perros de asistencia como protagonistas, a la vez que comparten las experiencia y conocimiento mutuo sobre ellos.

"Comenzamos a colaborar con ellos en 2017 y la iniciativa se desarrolla a nivel nacional", apunta Larre, que también destaca los numerosos beneficios, a nivel psicológico, cognitivo y psicomotriz, que aporta la terapia asistida con animales, además de ayudar a mejorar la comunicación y la socialización de los pacientes, mejorando el día a día de personas con necesidades especiales. Como, por ejemplo, el autismo, en donde los animales son un gran aliado. En esta iniciativa en concreto, varios empleados de Royal Canin se han implicado activamente en diferentes fases de este tipo de entrenamientos: "Lo más importante del equipo humano que participa es que sean conscientes de la responsabilidad que supone colaborar en la iniciativa, a nivel de tiempo, rutinas y socialización", matizan.

Otro punto en el que los responsables de Royal Canin y la Fundación Bocalán hacen hincapié es en subrayar que un perro es un ser vivo, "que necesita cuidados, atención, implica gastos y tiene sus propias necesidades", destaca Larre. De ahí que la información, adecuada y correcta, sea clave para no crearse falsas expectativas, en el sentido de que el perro es una ayuda más, "pero también es necesario un proceso de adaptación e incluir sus rutinas a las de la familia. El contacto con una asociación profesional y con personal experto, como la Fundación Bocalán, es importante para facilitar toda la información al respecto y sentirse apoyado en todo el proceso".

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