Las reacciones adversas a los alimentos, a revisión

En el marco de Iberzoo+Propet, Jaime Molina, veterinario de Ownat, impartió una conferencia centrada los tipos de RAA y en el importante papel que juegan las dietas de eliminación en su tratamiento.

28/03/2019

Una de las conferencias celebrada en el marco de berzoo+Propet se centró en el abordaje de las reacciones adversas debidas a la alimentación en perros y gatos, un problema bastante frecuente en la clínica veterinaria. Según apuntó Jaime Molina, veterinario de Ownat, durante su intervención, las RAA, reacciones adversas a los ...

Una de las conferencias celebrada en el marco de berzoo+Propet se centró en el abordaje de las reacciones adversas debidas a la alimentación en perros y gatos, un problema bastante frecuente en la clínica veterinaria.

Según apuntó Jaime Molina, veterinario de Ownat, durante su intervención, las RAA, reacciones adversas a los alimentos, pueden ser principalmente debidas a alergias o intolerancias: "las alergias cursan con una base inmunológica, mientras que las intolerancias son una incapacidad metabólica, generalmente debida a la falta de una enzima necesaria para digerir un alimento". "Cabe destacar que el nutriente más implicado en procesos alérgicos es la proteína, de ahí que el número de fuentes de proteína sea un factor clave", apuntó Molina.

El hilo conductor de la ponencia fue el importante papel que juegan las dietas de eliminación, ya que ambos casos (alergias e intolerancias), se tratan de la misma manera, eliminando de la dieta el agente causal de la reacción adversa. El veterinario de Ownat explicó que los síntomas clínicos van desapareciendo hasta remitir entre las 2 y las 8 semanas posteriores a la eliminación, en función de si se trata de cuadros digestivos o dermatológicos.

Por otro lado, Molina señaló que los procesos térmicos y químicos afectan a la calidad de la proteína, y que en determinadas ocasiones las lesiones cutáneas asociadas a cuadros dermatológicos, así como cuadros digestivos, pueden aumentar las necesidades de proteína, por lo que lo ideal sería mantener una dieta con un buen aporte de una fuente de proteína (dietas monoproteicas) que no sea la que origine la reacción alérgica.

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