El Hospital Veterinari Glòries ha ampliado recientemente su equipo tecnológico sanitario con un avanzado TAC para animales, convirtiéndose en centro de referencia en el diagnóstico de imagen.

La clínica pone a disposición de las mascotas de sus usuarios un escáner helicoidal General Electric de 8 cortes submilimétrico para uso veterinario, lo que le permitirá realizar estudios avanzados de imagen a sus pacientes y a animales referidos de otros centros.

Según explica Carlos Portero Visa, director del Hospital Veterinari Glòries, "un TAC para animales es, en líneas generales, idéntico al que se utiliza en medicina humana. El TAC (tomografía axial computerizada) es una prueba de imagen de alta resolución basada en el uso de rayos X como las máquinas de radiografías clásicas. El modo de captura y el procesado de los datos obtenidos por un programa informático permiten obtener imágenes en 2D y en 3D de alta resolución con grandes ventajas en el campo del diagnóstico en medicina veterinaria".

Esta herramienta diagnóstica detecta con gran precisión lesiones y defectos de pequeño tamaño que serían indetectables por métodos más tradicionales, como las radiografías o la ecografía. Igual que en las personas, en animales esta mayor precisión puede suponer una gran diferencia a la hora de detectar pequeños defectos traumatológicos (fracturas, defectos de desarrollo), presencia de cuerpos extraños (intestinales o espigas migratorias) o la detección de tumores y sus metástasis, por nombrar solo unos pocos ejemplos de las muchas condiciones en las que un TAC puede impactar marcadamente en el diagnóstico, pronóstico y tratamiento de la condición de la mascota. Además, el uso de contraste intravenoso permite recopilar información adicional fundamental, como el grado de vascularización de los órganos y lesiones, la invasión de tumores para un mejor planteamiento quirúrgico y la presencia de coágulos o lesiones vasculares. "Todas estas características hacen del TAC una herramienta de gran valor diagnóstico y difícilmente sustituible por los métodos diagnósticos clásicos, que son los que se suelen utilizar en la mayoría de clínicas veterinarias", aclara Portero.

El Hospital Veterinari Glòries ofrece el servicio de TAC para pacientes propios y para los pacientes de veterinarios referentes que lo soliciten. "No realizamos esta prueba a petición de propietarios, a menos que haya sido solicitado y discutido con un veterinario anteriormente. En caso de no disponer de veterinario de cabecera se organizará una visita con un veterinario de nuestro equipo que valorará el caso y ofrecerá la mejor estrategia para la mascota". Las imágenes obtenidas son interpretadas por el servicio remoto especializado en diagnóstico por imagen, que analiza minuciosamente el estudio y proporciona un informe detallado de fácil interpretación por el veterinario referente. Al estar abierto las 24 horas y ubicado en el centro de Barcelona, el Hospital Veterinari Glòries hace muy cómodo y flexible la disponibilidad para realizar los estudios de TAC.

Una de las principales preocupaciones para los usuarios es la exposición de sus mascotas a la radiación, pero según indican los especialistas de Hospital Veterinari Glóries, aunque El TAC es una máquina potente que usa cantidades elevadas de radiación en comparación con las radiografías tradicionales, la dosis recibida por el animal, incluso en casos de repetidos TACs con meses o años de diferencia, no suponen un problema para su salud.

"Para hacernos una idea, la dosis recibida es solo una pequeña fracción de la que reciben pacientes humanos en casos de tratamientos con radioterapia. Solo está contraindicado en pacientes en estado de gestación. El contraste radiológico intravenoso que nosotros utilizamos se considera muy seguro, y todos los pacientes son evaluados por nuestros veterinarios antes de someterse a un TAC. También es importante tener en cuenta que los animales requieren sedación o anestesia general en todos los casos para poder realizar un TAC, ya que el paciente tiene que permanecer completamente inmóvil y en una posición concreta durante unos 10-20 minutos. Por este motivo es también necesario un chequeo de salud realizado por un veterinario antes de proceder con el estudio. Todo ello garantiza la máxima seguridad de nuestras mascotas", concluye Portero.