Un nuevo colirio experimental reduce de forma significativa la presión intraocular en gatos normales y con glaucoma, según un estudio piloto

El glaucoma felino es una neuropatía óptica progresiva que puede pasar desapercibida hasta fases avanzadas y que con frecuencia desemboca en ceguera irreversible o en la necesidad de enuclear el ojo afectado.

Estado: Esperando

05/12/2025

Un estudio piloto publicado el 3 de diciembre de 2025 en Veterinary Ophthalmology ha demostrado que el colirio omidenepag isopropyl (OMDI) al 0,002% puede reducir de manera significativa la presión intraocular (PIO) tanto en gatos sanos como en gatos con glaucoma congénito felino (FCG), sin provocar miosis ni irritación ocular. ...

Un estudio piloto publicado el 3 de diciembre de 2025 en Veterinary Ophthalmology ha demostrado que el colirio omidenepag isopropyl (OMDI) al 0,002% puede reducir de manera significativa la presión intraocular (PIO) tanto en gatos sanos como en gatos con glaucoma congénito felino (FCG), sin provocar miosis ni irritación ocular. El hallazgo abre la puerta a una posible nueva opción terapéutica en una enfermedad que supone un importante desafío clínico para veterinarios y propietarios.

El glaucoma felino es una neuropatía óptica progresiva que puede pasar desapercibida hasta fases avanzadas y que con frecuencia desemboca en ceguera irreversible o en la necesidad de enuclear el ojo afectado. A diferencia de otras especies, como humanos y perros, los fármacos convencionales usados en glaucoma -especialmente los agonistas del receptor FP- muestran eficacia limitada en gatos debido a diferencias en la expresión de receptores oculares. Esta falta de tratamientos efectivos ha generado un interés creciente por alternativas que actúen a través de vías farmacológicas distintas.

Un ensayo piloto con resultados prometedores

El equipo investigador del Royal Veterinary College (RVC) evaluó los efectos del OMDI -un agonista selectivo del receptor EP2 aprobado en humanos desde 2022- en 18 gatos, 10 con glaucoma congénito y 8 normales. En un ensayo prospectivo, aleatorizado y enmascarado, a cada gato se le administró una única gota del colirio OMDI en un ojo, mientras que el ojo contralateral recibió lágrimas artificiales como control. A continuación, se midió la PIO y el diámetro pupilar (DP) durante un periodo de hasta 36 horas, con observadores que desconocían qué tratamiento había recibido cada ojo.

Los resultados fueron contundentes: en gatos normales, el OMDI redujo la PIO de forma significativa hasta 12 horas después de la aplicación, alcanzando un descenso máximo de 7,3 mmHg (43,5%). En los gatos con glaucoma congénito, la reducción fue incluso mayor: el colirio disminuyó la presión en 16,7 mmHg (60,2%), con efecto significativo entre las 2 y las 8 horas posteriores. En ningún caso se registraron cambios clínicamente relevantes en el diámetro pupilar ni signos de irritación ocular, algo especialmente relevante dado que muchos fármacos usados en otras especies producen miosis y dificultan la evaluación oftalmológica.

Un tratamiento que podría llenar un vacío terapéutico

El omidenepag isopropyl es un medicamento de nueva generación que, una vez instilado, se convierte en su forma activa dentro del ojo y actúa sobre los receptores EP2 para favorecer la salida del humor acuoso. A diferencia de los agonistas FP tradicionales, su mecanismo parece funcionar mejor en gatos, una especie en la que la farmacología del glaucoma ha sido históricamente problemática.

Estudios previos ya habían sugerido que OMDI podía ser útil en animales con glaucoma resistente, pero no existía hasta ahora un análisis controlado que evaluara sus efectos tanto en gatos sanos como en pacientes con glaucoma espontáneo. Los autores destacan que este trabajo proporciona pruebas iniciales sólidas de que los agonistas selectivos del receptor EP2 podrían convertirse en una herramienta valiosa dentro del arsenal terapéutico veterinario.

Sin efectos secundarios y con posibilidades de uso ampliado

Además de no inducir miosis, el colirio no causó blefaroespasmo, hiperemia conjuntival, quemosis ni secreción, lo que respalda un perfil de tolerabilidad favorable. El estudio también sugiere que los efectos del fármaco podrían variar en duración entre gatos normales y gatos glaucomatosos debido a diferencias anatómicas, como el mayor volumen de cámara anterior en ojos con FCG. Estas variaciones podrían influir en la frecuencia de administración recomendada, especialmente considerando que en humanos el fármaco se aplica una vez al día.

Los investigadores subrayan, sin embargo, que este estudio probó únicamente una dosis única y en un grupo pequeño, por lo que serán necesarios ensayos a largo plazo para determinar el régimen óptimo de administración, su eficacia continuada y si ofrece beneficios en otras formas de glaucoma felino más comunes, como el secundario.