Cinco señales sutiles que alertan de que tu gato puede estar enfermo

Los gatos, ágiles y discretos por naturaleza, pueden ocultar signos de dolor o enfermedad, lo que dificulta a sus cuidadores identificar un problema de salud a tiempo. Por ello, los expertos de Royal Canin destacan la importancia de las revisiones veterinarias periódicas y de la observación diaria, y señalan cinco señales de alarma -a menudo sutiles- que nunca deben ignorarse para garantizar un diagnóstico temprano y una atención adecuada.

Estado: Esperando

26/11/2025

Los gatos son ágiles y atléticos, unos cazadores natos que llenan el hogar de vitalidad, pero su naturaleza también les lleva a ocultar instintivamente cualquier signo de dolor o enfermedad. Esta habilidad para enmascarar el malestar puede dificultar que sus cuidadores detecten un problema de salud a tiempo. Por ello, ...

Los gatos son ágiles y atléticos, unos cazadores natos que llenan el hogar de vitalidad, pero su naturaleza también les lleva a ocultar instintivamente cualquier signo de dolor o enfermedad. Esta habilidad para enmascarar el malestar puede dificultar que sus cuidadores detecten un problema de salud a tiempo. Por ello, los expertos de Royal Canin subrayan la importancia de las visitas periódicas al veterinario para prevenir, pero también la importancia de la observación. En concreto comparten cinco señales de alarma sutiles que nunca deben ser ignoradas y por la que se debería acudir al veterinario.

"Cualquier cambio en el comportamiento o en las rutinas de un gato debe ser considerado como una posible señal de alerta. Actuar con rapidez ante estos indicios puede ser determinante para el diagnóstico precoz y el tratamiento eficaz de diversas afecciones", explica Gemma Baciero, veterinaria acreditada por AVEPA del equipo de Royal Canin.

Cinco señales a tener en cuenta

1. Cambios en el uso de la bandeja de arena. Si el gato empieza a orinar fuera de su bandeja, intenta orinar con más frecuencia de lo normal, maúlla de dolor al hacerlo o pasa mucho tiempo en el arenero sin conseguir nada, podría ser un indicio de problemas urinarios. Estas afecciones pueden ser graves y requieren atención veterinaria inmediata.

2. Alteraciones en el apetito y la sed. La pérdida de interés por la comida es una de las señales más claras de que algo no va bien. Del mismo modo, un aumento o disminución drástica en la cantidad de agua que bebe puede estar relacionado con diversas condiciones de salud que necesitan ser evaluadas por un profesional.

3. Apatía y falta de energía. Si de repente se muestra más apático, se esconde más de lo habitual o pierde el interés por jugar y relacionarse, es un cambio de comportamiento significativo que no debe pasarse por alto. La apatía puede ser el primer síntoma de fiebre o dolor.

4. Descuido en su aseo personal. Los gatos son animales extremadamente limpios. Un pelaje descuidado o sucio indica que el gato ha dejado de asearse, un comportamiento que suele estar ligado al malestar o a la enfermedad.

5. Maullidos inusuales. Aunque algunos gatos son más "parlanchines" que otros, un aumento repentino en sus maullidos, o un cambio en el tono de los mismos, puede ser su forma de comunicar que siente dolor, ansiedad o malestar. Es una llamada de atención que merece ser escuchada.

"Los cuidadores son la primera línea de defensa para la salud de los gatos", recuerda Baciero. "Conocer el comportamiento normal de su gatito es lo que les permitirá detectar estas sutiles pero cruciales desviaciones". Ante la duda, la recomendación es siempre la misma: no esperar y consultar con el veterinario. La prevención y la detección temprana son los mejores aliados para garantizar una vida larga y saludable para el nuevo miembro de la familia.