
Estado: Esperando
Hablemos de innovación y salud animal. Fue un encuentro diseñado para compartir conocimiento, explorar nuevas perspectivas y dialogar sobre el futuro del cuidado de los animales de compañía, junto a profesionales y expertos de referencia. La sesión plenaria del Simposio Vetnia by Elanco, este jueves, comenzó con la bienvenida de ...
Hablemos de innovación y salud animal. Fue un encuentro diseñado para compartir conocimiento, explorar nuevas perspectivas y dialogar sobre el futuro del cuidado de los animales de compañía, junto a profesionales y expertos de referencia. La sesión plenaria del Simposio Vetnia by Elanco, este jueves, comenzó con la bienvenida de Montse Tarancón, directora de Marketing, señaló que la visión de Elanco es "mejorar la vida de los animales para mejorar la vida del planeta" y que los clientes están "en el centro" de todo lo que hacen. Destacó que "la veterinaria es una profesión en la que hay que estar en continua formación".
En esta edición del Simposio, la ciencia y la innovación son protagonistas. Son claves para mejorar la salud animal, pero también lo son la ética y la confianza. Elanco acompaña a los profesionales veterinarios, reconociendo su vocación y su impacto positivo tanto en los animales como en la sociedad. La marca Vetnia se presenta como una comunidad profesional veterinaria comprometida con esa mejora. Respalda la importancia de la profesión veterinaria en la sociedad, promoviendo conocimiento y formación.
Alejandra González Sánchez, Head Digital Marketing & Communication Iberia, insistió en que lo que quieren es "hacer un mundo mejor para los animales y las personas". El programa Dejemos Huella, desde hace más de 25 años, trabaja para fomentar la adopción y el no abandono, por ejemplo. Una de las últimas iniciativas es llevar perros de terapia a los tanatorios en España. Otro ámbito para buscar la visibilidad de los perros que están en protectoras y promover la adopción es el del fútbol, con la colaboración de clubes como el Espanyol y realizando la alineación de dichos perros en el propio campo. Mas de 235.000 personas al año se ven beneficiadas por este programa.
Amanda André, responsable del área de Prescripción, desgranó al programa del día y habló de sus dos AINE únicos en su modo de acción, propiedades farmacacodinámicas y fármacocinéticas, y que son complementarios en el abordaje de la oesteoartritis canina: Onsior (robenacoxib) y Galliprant (grapiprant).
Dio paso a Agustín Martínez, con una ponencia sobre el manejo de la OA en perros jóvenes. Expuso que es una enfermedad progresiva que no se cura. Esta enfermedad la abordan los traumatólogos, los anestesiólogos, "porque genera dolor", y los rehabilitadores. "Es bueno el trabajo conjunto y esto es muy complejo como para no tratarlo de manera multidisciplinar", dijo. Genera dolor, reducción de la actividad, pérdida de masa muscular, sensibilidad al dolor, aumento de peso, entre otros síntomas. La principal preocupación de los tutores es el dolor. Algo novedoso es que hay osteoartritis en perros jóvenes.
Lamentó que se diagnostica tarde y mal. Hay que empezar por la observación. Si no se trata, va a más. Se hará una exploración física general, siendo activa y pasiva. Es decir, una exploración nociceptiva. El inicio es silencioso. Se dan cambios bioquímicos y celulares en el cartílago y la membrana sinovial. Repasó las distintas técnicas de imagen para el diagnóstico. ¿Cómo es el dolor? Articular, óseo o muscular. Este último es muy difícil de tratar farmacológicamente. La rehabilitación tiene mucho que decir en este. Hay un componente neuropático, porque hablamos de un dolor crónico. El proceso osteoartrósico es como "una montaña rusa". Hay picos, lo que obliga a hacer un "seguimiento continuo". El dolor se objetivizará con escalas. Se puntuará igualmente la postura y la musculación. El COAST recoge valoraciones del tutor.
Analgesia, ejercicio físico y control de peso son la base de las estrategias iniciales. El sobrepeso hace que haya más sobrecarga, pero del mismo modo menos masa muscular. González Sánchez avisó de que la grasa es un ambiente proinflamatorio. El ejercicio físico reducirá la inflamación y fortalecerá la musculatura. Para el tratamiento, hay un gran arsenal. Recomendó una alimentación controlada, ejercicio progresivo y control del peso. Sobre suplementos nutricionales; citó los ácidos Omega-3, el colágeno tipo II no desnaturalizado, la glucosamina y condroitina, mejillón de labios verdes y cannabinoides. Hay que individualizar el tratamiento farmacológico, porque cada perro es un mundo. Hay terapias complementarias que se pueden dar e intervenciones avanzadas como inyecciones intramusculares. La intervención precoz es clave del éxito.
Acto seguido, Pedro Godinho profundizó en la realidad de la OA en perros jóvenes. Aparte de tratar el dolor, "hay que cambiar el futuro de los países". La claudicación y dolor, la inflamación y la efusión articular son características comunes a todos. El deber como veterinarios es intentar que los perros no necesiten tratamiento. Expuso las ventajas de una varización del eje mecánico de la extremidad en un caso clínico, para que deje de tener un desarrollo rápido de la enfermedad. Hay que desplazar las cargas y aliviar las cargas sobre las articulaciones.
Hay que intentar no condenar a los animales toda la vida con infiltraciones. Propuso tratar la causa anatómica subyacente. Idealmente, "se debería tratar el problema antes del desarrollo de la OA". Y hay que perder el miedo a dar antiinflamatorios.
