El frío y el sedentarismo aumentan el riesgo de problemas urinarios en gatos durante el otoño

Con la llegada del frío, muchos gatos reducen su actividad y su ingesta de agua, lo que puede derivar en orina más concentrada y trastornos como cristales, cistitis o infecciones urinarias. Veterinarios de Sanitas recuerdan la importancia de fomentar la hidratación mediante fuentes de agua, dieta húmeda y revisiones periódicas.

Estado: Esperando

21/10/2025

Con la llegada del otoño y la bajada de temperaturas, muchos gatos pasan más tiempo en interiores, consumen principalmente pienso seco y reducen su actividad física. Esta combinación disminuye de forma natural la ingesta de agua y provoca una orina más concentrada, lo que incrementa el riesgo de problemas urinarios ...

Con la llegada del otoño y la bajada de temperaturas, muchos gatos pasan más tiempo en interiores, consumen principalmente pienso seco y reducen su actividad física. Esta combinación disminuye de forma natural la ingesta de agua y provoca una orina más concentrada, lo que incrementa el riesgo de problemas urinarios como cristales, cistitis o infecciones del tracto urinario.

"Los síntomas más frecuentes incluyen micciones repetidas, dolor al orinar, presencia de sangre en la orina o cambios de comportamiento, como esconderse o mostrarse más irritables. También pueden aparecer signos como orinar fuera de la bandeja, lamerse en exceso la zona genital, apatía o mal humor. Si no se detectan a tiempo, estos problemas pueden derivar en obstrucciones urinarias, infecciones recurrentes o incluso daño renal", explica Ana Hernández, veterinaria de Sanitas.

Además de la disponibilidad de agua, la forma en que los gatos interactúan con su entorno también influye en su hidratación. Algunos prefieren beber justo después de comer o tras jugar, lo que les permite combinar actividad y consumo de líquidos. Otros se muestran más dispuestos si se les ofrece agua en diferentes alturas o recipientes adaptados a su tamaño o postura. "Conocer estos pequeños hábitos permite a los dueños facilitar la ingesta de agua de manera natural", añade Ana Hernández,

Para mantener a los gatos hidratados y prevenir problemas urinarios, los especialistas de Sanitas recomiendan:

  • Utilizar fuentes de agua. Muchos gatos prefieren beber agua en movimiento, ya que la perciben como más fresca y atractiva. Las fuentes estimulan la curiosidad y pueden duplicar o incluso triplicar la ingesta diaria de líquidos. Colocarlas en un lugar tranquilo, alejado de la comida y del arenero, aumenta su eficacia.
  • Incorporar dieta húmeda. Alternar o complementar el pienso con comida húmeda incrementa de forma notable la ingesta de agua, lo que ayuda a diluir la orina y a reducir el riesgo de formación de cristales. Incluso pequeñas raciones diarias pueden marcar la diferencia en gatos que suelen beber poco.
  • Favorecer el juego y la actividad física. La estimulación mediante el juego mantiene al gato activo y saludable, y puede animarlo a beber más, especialmente si se combina con premios húmedos o snacks hidratantes. Además, la actividad regular contribuye a una función renal más eficiente y a la prevención de problemas urinarios.
  • Realizar controles veterinarios periódicos. Las revisiones ayudan a identificar predisposiciones a problemas urinarios y permiten recibir recomendaciones adaptadas a la edad, raza, alimentación y hábitos de cada gato. Los análisis rutinarios de orina o los chequeos generales evitan que una complicación leve se convierta en un problema grave. Siempre es recomendable contar con seguros como el de Sanitas Salud Mascotas, que protege la salud de las mascotas frente a imprevistos.

"Además, estudios recientes muestran que la temperatura y la humedad del hogar influyen en la ingesta de agua. Mantener un ambiente ligeramente más cálido y con niveles adecuados de humedad favorece que los gatos beban con mayor regularidad y, en consecuencia, disminuye el riesgo de problemas urinarios", concluye.

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