Desde 2019 y con la única interrupción provocada por la crisis del Covid-19 en el año escolar 2020/2021, el Colegio de Veterinarios de Alicante (Icoval) ha consolidado su programa de talleres sobre tenencia responsable de animales en centros educativos de la provincia. Un total de 13.640 alumnos alicantinos de primaria ...
Desde 2019 y con la única interrupción provocada por la crisis del Covid-19 en el año escolar 2020/2021, el Colegio de Veterinarios de Alicante (Icoval) ha consolidado su programa de talleres sobre tenencia responsable de animales en centros educativos de la provincia. Un total de 13.640 alumnos alicantinos de primaria han recibido esta formación desde el inicio de este plan, demostrando la creciente implicación del colectivo veterinario con la educación y la concienciación desde edades tempranas. Durante el último curso 2024/2025, participaron 2.772 niños de tercero a sexto de la ESO (entre 6 y 10 años) de 126 aulas de distintos colegios. Estos talleres, de carácter dinámico y adaptados al nivel pedagógico del alumnado, combinan elementos lúdicos con contenidos formativos que transmiten valores clave como el bienestar animal, la salud pública, la seguridad alimentaria y la prevención de zoonosis, dentro de un enfoque integral One Health (Una sola salud).
"Cada taller es una oportunidad para que los niños comprendan la importancia del respeto hacia los animales, y cómo su cuidado impacta directamente en nuestra salud y en la sociedad", destaca Gonzalo Moreno del Val, presidente de Icoval.
El programa es llevado a cabo actualmente por un equipo de tres monitores veterinarios colegiados, seleccionados mediante convocatoria previa y especialmente formados para adaptar sus intervenciones a clases de primaria pero también -en algunos casos- a contextos educativos ocupacionales, destinados a personas con diversidad funcional.
Durante 45 minutos, estos profesionales exponen de manera pedagógica, con juegos y promoviendo la interacción constante y el debate entre los niños y el propio veterinario, la llamada perspectiva One health. Bajo este enfoque se aborda cómo se interrelaciona la salud animal -y los cuidados básicos específicos que requieren los animales domésticos-, la salud humana -con especial atención al concepto de salud pública y zoonosis, esto es, las enfermedades de origen animal que pueden transmitirse a las personas- y su relación con el entorno, con la salud medioambiental. Durante estos espacios -que las direcciones de los centros escolares conciertan con Icoval- los niños pueden conocer desde la importancia de cumplir con el calendario de vacunas hasta comprobar cómo los animales son identificados y practicar con el mismo lector de microchips que usan los policías locales para localizar a los responsables de un perro o gato que pudiera haberse extraviado o haber sido hurtado. De forma paralela, estas clases sirven para divulgar el papel real de la profesión veterinaria, no sólo ligada a la atención sanitaria de los animales domésticos o de los de producción, sino también muy vinculada a la propia prevención frente a tales zoonosis, a velar por la seguridad alimentaria y la protección del medio ambiente, vinculada con la investigación y con la propia docencia. Tras el turno de preguntas que se suele dar y en el que los niños se muestran siempre especialmente participativos, reciben el libro de los 'Icovalitos', una publicación ilustrada en formato cómic, creada por Icoval, que narra las aventuras de Max, un perro curioso que descubre el mundo de la veterinaria. A través de sus viajes, Max enseña a los niños la importancia del papel que desempeñan los veterinarios en ámbitos como la sanidad animal, la ganadería, la ciencia o la seguridad alimentaria, reforzando así los contenidos impartidos en el aula.
Con la mirada puesta en el futuro, Icoval aspira a ampliar su alcance en el curso 2025-2026, con el objetivo de llegar a 150 aulas en centros de primaria y ocupacionales, reforzando su compromiso con la sensibilización y el aprendizaje inclusivo.