Un nuevo estudio publicado en la revista Frontiers in Veterinary Science revela que la periodontitis, la gingivoestomatitis crónica felina y la reabsorción dental son las principales enfermedades responsables de la extracción de dientes en gatos. La investigación, liderada por Chun-Geun Kim junto a un equipo multidisciplinar de universidades y hospitales ...
Un nuevo estudio publicado en la revista Frontiers in Veterinary Science revela que la periodontitis, la gingivoestomatitis crónica felina y la reabsorción dental son las principales enfermedades responsables de la extracción de dientes en gatos. La investigación, liderada por Chun-Geun Kim junto a un equipo multidisciplinar de universidades y hospitales veterinarios de Corea del Sur, analizó más de 47.000 dientes de 1.580 gatos durante seis años.
El trabajo se convierte en uno de los estudios más exhaustivos hasta la fecha sobre salud oral felina, con resultados que subrayan la importancia de los cuidados dentales preventivos, especialmente en gatos mayores.
Según los datos recopilados, la periodontitis fue la causa más frecuente de extracción dental (33,4%), seguida muy de cerca por la gingivoestomatitis crónica felina (32,4%) y la reabsorción dental (15,2%). Cada una de estas enfermedades mostró características particulares en función de la edad, la raza o la localización de los dientes afectados.
Los investigadores constataron que la periodontitis y la reabsorción dental aumentan significativamente con la edad. De hecho, los gatos de más de 15 años presentaron de media el doble de dientes extraídos por reabsorción dental en comparación con los de menos de seis años. Por el contrario, la gingivoestomatitis mostró una mayor incidencia en animales jóvenes, especialmente en los menores de seis años, confirmando que esta patología puede comenzar de manera temprana y causar un deterioro rápido de la salud oral y del bienestar general.
En cuanto a las razas, los gatos domésticos de pelo corto fueron el grupo más afectado por la gingivoestomatitis, mientras que las razas persa, mixta y turca de Angora presentaron un mayor número de extracciones por reabsorción dental. Los investigadores advierten, no obstante, que la elevada representación de ciertas razas en la muestra puede influir en la interpretación de estos resultados.
En relación con la localización dental, la reabsorción se detectó con especial frecuencia en los terceros premolares mandibulares, mientras que la periodontitis afectó más a molares superiores e incisivos. Estas diferencias anatómicas son relevantes porque pueden orientar a los veterinarios a realizar exploraciones más minuciosas en piezas con mayor predisposición.
Los autores destacan que muchos casos se diagnostican de forma tardía porque los síntomas iniciales pasan desapercibidos. En palabras de Hyun Min Jo, autor principal de correspondencia, "los gatos son especialmente sensibles al dolor, y la pérdida de apetito u otros signos de malestar suelen aparecer cuando la enfermedad está avanzada". Además, factores como la dificultad de cepillado dental en casa, la falta de revisiones regulares bajo anestesia y el desconocimiento de la importancia de la salud oral felina contribuyen al retraso en el tratamiento.
El estudio pone de manifiesto que, en un tercio de los casos, las piezas dentales que se extraen presentan lesiones graves y crónicas que afectan a la calidad de vida de los animales. "La prevención es la herramienta más poderosa para reducir estas patologías", concluyen los investigadores, que recomiendan incorporar revisiones dentales periódicas con radiografías intraorales y fomentar la concienciación de los propietarios sobre la higiene bucal de sus gatos.
Por último, el equipo señala que estos hallazgos podrían servir como punto de partida para diseñar estrategias de manejo más individualizadas, tanto en la clínica como en casa, así como nuevas investigaciones sobre la influencia de la dieta, la genética y el ambiente en la salud dental felina.