La epilepsia idiopática es la más frecuente en perros con exploraciones neurológicas interictales normales

Investigadores afirman que las causas estructurales son poco frecuentes en perros con exploraciones neurológicas interictales normales, siendo más frecuentemente epilepsias idiopáticas. No obstante, el riesgo de que la epilepsia sea estructural aumenta con la edad del paciente. Por ello, todos estos factores se deben tener en cuenta a la hora de recomendar llevar a cabo una prueba de resonancia magnética.

26/06/2025

El artículo "High-field MRI findings in epileptic dogs with a normal inter-ictal neurological examination", publicado por la revista Frontiers in Veterinary Science, señala que, en pacientes con exploraciones neurológicas normales entre episodios epilépticos, el origen suele ser idiopático. Sin embargo, en pacientes geriatras, la probabilidad de una causa estructural es ...

El artículo "High-field MRI findings in epileptic dogs with a normal inter-ictal neurological examination", publicado por la revista Frontiers in Veterinary Science, señala que, en pacientes con exploraciones neurológicas normales entre episodios epilépticos, el origen suele ser idiopático. Sin embargo, en pacientes geriatras, la probabilidad de una causa estructural es mayor. Ante estos hallazgos, los autores recomiendan considerar en cada caso la necesidad de recomendar una resonancia magnética, siendo posiblemente de mayor utilidad diagnóstica en perros de mayor edad.

La epilepsia es la alteración neurológica más común en perros. Las crisis epilépticas se pueden producir de forma secundaria a otros procesos patológicos, por lo que puede tener etiología metabólica o toxicológica (denominadas como epilepsias reactivas), estructural o idiopática (origen genético o desconocido).

El Grupo de Trabajo Internacional sobre Epilepsia Veterinaria (IVETF por sus siglas en inglés) recomienda que los perros que tienen su primer episodio epiléptico con menos de 6 meses o más de 6 años deben ser sometidos a una prueba de resonancia magnética para evaluar el encéfalo y detectar una posible causa estructural.

El objetivo de este estudio fue describir los hallazgos obtenidos en las resonancias magnéticas de 412 perros epilépticos con exploraciones neurológicas interictales normales, determinando la prevalencia de epilepsias de origen estructural en estos pacientes que no muestran signos neurológicos entre episodios epilépticos.

Bajo riesgo de causa estructural

Los investigadores apuntan que, de los 412 perros incluidos en el estudio, solamente 16 (3,9%) eran epilépticos debido a causas estructurales. Estudios anteriores describen una frecuencia más elevada de epilepsias estructurales en perros. Sin embargo, dichos estudios agrupan perros con signos neurológicos y sin signos entre episodios epilépticos. Por lo tanto, en perros con exploraciones interictales normales, las epilepsias estructurales no son frecuentes.

En cachorros, se tiende a sospechar de una causa estructural congénita que esté causando el episodio epiléptico. Sin embargo, mientras que las exploraciones neurológicas sean normales, los cachorros también presentan un bajo riesgo de que la causa sea estructural.

Por el contrario, el riesgo de una epilepsia estructural aumenta con la edad. De esta manera, el 23,1% de los pacientes de 8 años presentaban epilepsia estructural, siendo este un porcentaje mucho mayor que el del total de la muestra (3,9%).

No obstante, una exploración neurológica normal no puede excluir una causa estructural, ya que existen ciertas áreas del encéfalo que no producen apenas signos, como la región olfatoria y los lóbulos piriformes. Además, la causa más frecuente de epilepsia estructural en este estudio eran las neoplasias, las cuales suelen crecer de forma progresiva, dando tiempo al encéfalo a adaptarse a estos cambios, lo que también dificulta la aparición de sintomatología neurológica. No obstante, los procesos tumorales suelen afectar en mayor medida a los pacientes de mayor edad, lo que respalda el aumento de epilepsias estructurales en este tipo de perros.

Finalmente, los investigadores recuerdan que existen ciertas razas, como los Border Terriers, los Staffordshire Bull Terriers y los Bóxers, que tienen una mayor predisposición a sufrir epilepsias estructurales causadas por neoplasias (principalmente gliomas). Por ello, es recomendable llevar a cabo resonancias magnéticas en estos pacientes.

En conclusión, los autores destacan que, en aquellos pacientes caninos con exploraciones neurológicas interictales normales, las causas estructurales son poco frecuentes. No obstante, el riesgo de epilepsia estructural es mayor en animales de más edad. Esto hace que el clínico deba valorar en qué casos recomendar una resonancia magnética, ya que no siempre puede ser necesaria.