Hace poco más de cinco meses, la Policía Nacional, en colaboración con el SEPRONA, desmanteló en Sagunto (Valencia) un grupo criminal dedicado a la falsificación de documentación para la venta de caniches toy. En reconocimiento a esta labor, la Real Sociedad Canina de España (RSCE) hará entrega de un premio ...
Hace poco más de cinco meses, la Policía Nacional, en colaboración con el SEPRONA, desmanteló en Sagunto (Valencia) un grupo criminal dedicado a la falsificación de documentación para la venta de caniches toy. En reconocimiento a esta labor, la Real Sociedad Canina de España (RSCE) hará entrega de un premio a ambos cuerpos de seguridad durante la Exposición Canina Internacional de Madrid, que se celebrará los días 24 y 25 de mayo. Este acto será una oportunidad para destacar el esfuerzo conjunto de las autoridades en la lucha de la protección del bienestar animal.
Este tipo de estafa, lejos de ser un caso aislado, representa una creciente preocupación en España, donde el mercado ilegal de perros de razas demandadas continúa expandiéndose. Gracias a la colaboración de los cuerpos de seguridad, se logró desarticular una red dedicada a la falsificación de pedigrís procedentes de China, que afectaba tanto al mercado nacional como al europeo.
El caso es especialmente grave no solo por el engaño que implica, sino también por su impacto económico, dado que este fraude forma parte de un negocio que mueve más de 4.000 millones de euros al año en Europa. Sin embargo, el problema va más allá de la estafa económica: detrás de cada pedigrí falso hay una cadena de cría irresponsable y sin garantías sanitarias, lo que pone en riesgo la salud y el bienestar de los animales.
Por esta razón, la RSCE insiste en la importancia de que los propietarios exijan de forma inmediata el certificado de pedigrí a criadores comprometidos y responsables. Esta práctica, respaldada por la Ley de Protección Animal, no solo contribuye al bienestar de los animales, sino que también promueve un mercado más ético y regulado, ayudando así a reducir la tasa de abandono animal.
El pedigrí no solo certifica la raza de un perro, sino que también ofrece trazabilidad completa, permitiendo conocer su linaje hasta cinco generaciones atrás. Esto garantiza no solo la pureza racial, sino también la salud y el equilibrio del animal, asegurando que ha sido criado en condiciones adecuadas. Contar con un pedigrí auténtico es una garantía de calidad, bienestar y seguridad para los propietarios.