La carne de pollo es la más consumida en el Reino Unido (FAOStat, 2025), pero solo una pequeña parte se produce siguiendo estándares de bienestar animal más elevados. Las normas científicas del Better Chicken Commitment (BCC) para el bienestar de los pollos de engorde abordan cuestiones como el crecimiento rápido, ...
La carne de pollo es la más consumida en el Reino Unido (FAOStat, 2025), pero solo una pequeña parte se produce siguiendo estándares de bienestar animal más elevados. Las normas científicas del Better Chicken Commitment (BCC) para el bienestar de los pollos de engorde abordan cuestiones como el crecimiento rápido, el alojamiento, la densidad de población y el sacrificio, con el objetivo de impulsar a la industria alimentaria hacia prácticas de bienestar superiores.
Para comprender mejor los desafíos y limitaciones a la hora de alcanzar estándares más altos de bienestar, el Royal Veterinary College (RVC) entrevistó a 30 representantes familiarizados y comprometidos con el BCC, centrándose específicamente en los motivos por los que el cambio a pollos de crecimiento más lento resulta especialmente problemático.
Cofinanciado por la Animal Welfare Foundation y el British Poultry Council, el estudio reveló que los participantes, en general, coincidían en que existe evidencia científica de que las cepas de crecimiento más lento tienen un mejor bienestar que los pollos de crecimiento rápido criados en condiciones similares. Sin embargo, algunos señalaron que el incremento de los costes económicos y medioambientales asociado al crecimiento más lento constituía una barrera importante. También se detectaron dudas sobre la disposición de los consumidores a pagar por estas mejoras sociales.
Las diferentes opiniones sobre la viabilidad de las soluciones se basaban en distintas concepciones de la sostenibilidad. Representantes de minoristas e industria subrayaron la necesidad de reducir la huella de carbono para alcanzar los objetivos de emisiones netas cero, y expresaron su preocupación por garantizar un suministro asequible de pollo para satisfacer la demanda, evitando así que los consumidores opten por productos de importación con peores estándares de bienestar pero precios más bajos. Por estas razones, consideraban que la producción con broilers de crecimiento más lento no era económicamente ni medioambientalmente viable. Su preferencia era mejorar el bienestar de las cepas convencionales de engorde o utilizar cepas intermedias que ofrecieran un equilibrio entre bienestar animal y sostenibilidad.
En contraste, representantes de organizaciones benéficas, científicos y planes de aseguramiento de bienestar adoptaron una visión más amplia de la sostenibilidad, considerando también aspectos como la contaminación del agua, la biodiversidad y factores sociales y económicos. Para ellos, el bienestar animal debía ser un componente esencial de cualquier sistema de producción sostenible y no debía sacrificarse en favor de objetivos ambientales.
Además, señalaron que las decisiones de compra de los consumidores no reflejan necesariamente sus verdaderas preferencias, debido a la confusión que genera el etiquetado y la falta de información sobre las prácticas de producción. Estos participantes abogaron por un cambio transformador del sistema alimentario, que incluyese estrategias para reducir los costes asociados al crecimiento más lento, una mejora del etiquetado y la comercialización, y un enfoque basado en consumir "menos, pero de mejor calidad".
El Dr. Siobhan Abeyesinghe, Profesor Asociado en Comportamiento Animal y Ciencias del Bienestar en el RVC y autor principal del estudio, señaló:
"Estos resultados demuestran que es urgente comprender mejor las expectativas de los consumidores del Reino Unido en torno al etiquetado y el bienestar de los pollos de engorde, así como saber cómo priorizan el bienestar frente a los costes ambientales y el precio. Esta es una pieza clave que falta actualmente para que las partes interesadas puedan evaluar de forma realista la importancia y viabilidad de diferentes mejoras en el bienestar de más de mil millones de pollos cada año."
Finalmente, concluye que, si las mejoras en el bienestar animal deben impulsarse desde el mercado, las ganancias en bienestar tienen que ser significativas en comparación con los costes adicionales, valoradas por los consumidores y equilibradas con otros objetivos de sostenibilidad.
Referencia:
Abeyesinghe S.M., Stanley, I., Nicol C.J., Cardwell, J.M. (2025). Vistas de las partes interesadas sobre el cambio de la producción de carne de pollo en el Reino Unido a cepas de crecimiento más lento. Frontiers in Animal Science 6:1534108.