IM VETERINARIA #6

47 im veterinaria N o haymejor medicina que la prevención. Esta premi- sa, sin duda, coge más fuerza cuando hablamos de los parásitos que afectan a los animales, tanto a pe- queños animales como a animales de producción. La elección del antiparasitario más adecuado, en el caso de los animales de compañía, dependerá mucho de la situación o de las circunstancias de propietario y animal. Como siempre, no es lo mismo un gato que no sale nunca de su casa, un perro que vive en un jardín y en zonas húmedas, o uno que sólo va al campo una vez cada mes. Es en este momento en el que el veterinario debe ofrecer la opción más adecuada para las ne- cesidades de cada animal. Una opción que va desde pastillas a collares, pasando por champús, pipetas y sprays, entre otros. En este número, y gracias a los datos ofrecidos por el Informe petSellout de la consultoría VetEvidence, vamos a analizar el mercado de los antiparasitarios externos orales. Gran evolución Los antiparasitarios externos orales, entre los cuales encon- tramos tabletas, grageas, comprimidos y demás, son aquellos que las mascotas tienen que ingerirlos por la boca. En los úl- timos años, estos han visto una gran evolución en cuanto a la palatabilidad y el sabor de las tabletas, para que sea más fácil que los animales las ingieran por sí mismos. En el caso de los gatos, también se han desarrollado, sobre todo, polvos, granu- lados y demás, para mezclar con la bebida o la comida, pues- to que en los felinos suele ser más complicado que tomen el comprimido. Tanto es así que, aunque en el caso de los perros sí que están teniendo muy buena aceptación los antiparasi- tarios externos orales, en el caso de los gatos la tendencia de usar el spot-on (pipetas) sigue predominando. Program Tablets fue el primer “pulguicida” sistémico (que ac- túa a través de la sangre) de aplicación mensual, que fue in- troducido en el mercado en los años 80 por Ciba-Geigy (luego Novartis Animal Health, hoy Elanco). Su lanzamiento, que se produjo en los EEUU y en otros países, fue toda una decla- ración de intenciones, ya que fue acompañado de costosas campañas publicitarias que, hasta ese momento, no se habían realizado nunca. En su momento fue conocido como la píldora para las pulgas y llegó a conseguir ventas superiores a los 100 millones de dólares americanos. Así pues, tuvo un éxito inicial considerable, pero corto, puesto que pocos años después sus competidores sacaron las pipetas, mucho más fáciles de admi- nistrar que las primeras tabletas Program. Empezó así una carrera por el control de los antiparasitarios de pulgas y garrapatas, en la que cada vez había mayor diver- sidad. No fue hasta la década de los 2000, cuando salió al mer- cado Confortis, de Elanco, otro de los pocos antiparasitarios externos en forma de tabletas orales. VENTA ANTIPARASITARIOS EXTERNOS ORALES Los datos incluyen antiparasitarios orales de amplio espectro Fuente: Datos procedentes de Informes petSellout 2016 ANTIPARASITARIOS EXTERNOS % RELATIVO EN 2016 Fuente: Datos procedentes de Informes petSellout 2016 Spot-on (A. Externos) 36% Collares 31% Orales (A.Externos) 21% Spot-on (Ecto-Endo) 7% Orales (Ecto-Endo) 2% Otros 3% 2015 2016 4ºTrimestre 3ºTrimestre 2ºTrimestre 1ºTrimestre 13% 17% 32% 8% 23% 40% 31% 35% En el segundo y tercer trimestre del 2016 se vendieron el 75% de los antiparasitarios externos orales

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