IM VETERINARIA #10

55 im veterinaria “Muchos hospitales de España cuentan con equipos multidisciplinares que trabajan a un nivel muy similar al de los países anglosajones” Ensayos clínicos en el IVOC y el Hospital Aúna Especialida- des Veterinarias Este centro veterinario nació con el objetivo de integrar a los diferentes actores que participan en el tratamiento del cáncer en animales de compañía, entre ellos los dueños de masco- tas, veterinarios de medicina general, oncólogos veterinarios y otros especialistas. Tal y como lo describe Borrego, “en un prin- cipio la idea era promover el acceso a la información y la dispo- nibilidad de ensayos clínicos y nuevos tratamientos en oncología veterinaria”. Para ello ha puesto en marcha diversos ensayos clínicos a nivel nacional e internacional para probar nuevas combinaciones de fármacos quimioterápicos, terapias dirigi- das y suplementos alimentarios específicos para el cáncer. Se trata de ensayos clínicos diseñados para intentar salvar o prolongar la vida de las mascotas con cáncer utilizando tera- pias novedosas, o ya utilizadas en las que se prueban nuevas combinaciones o nuevos usos. “ Un ejemplo es el uso reciente de terapias teledirigidas en otros tumores que no son mastocito- mas”, destaca Borrego, para quien “gracias a los estudios clínicos se ha podido comenzar a tratar estos pacientes con buenas res- puestas en algunos casos”. Añade que, a la vez, proporcionan a los investigadores “información relevante sobre la toxicidad, la respuesta, la farmacocinética, farmacodinámica, dosis, régimen, biomarcadores tumorales y respuestas dependiendo de las his- tologías tumorales tratadas, facilitando el avance en la terapia contra el cáncer”. Accesibilidad a los tratamientos Los acuerdos con diferentes compañías farmacéuticas y gru- pos de investigación permiten que muchos de los fármacos y tratamientos empleados en estos estudios sean subvenciona- dos total o parcialmente. “Eso facilita el acceso a tratamientos muy novedosos y potencialmente efectivos en casos en que los dueños de las mascotas no dispongan de recursos”, matiza. Es el caso de los dos estudios que han llevado a cabo en el IVOC sobre el linfoma canino y felino, en los que todo el tratamiento era gratuito y permitió que el 100% de los pacientes diagnos- ticados se pudiera tratar. “Al final más de 60 pacientes fueron tratados en un año, algo que hubiese sido imposible si los due- ños de los animales hubiesen tenido que costear el tratamiento”, asegura el experto. En su opinión, la mayoría de estos nuevos tratamientos están diseñados con un amplio conocimiento describen que el 45% de los perros que viven 10 años o más morirán de cáncer. Además, en una encuesta de Morris Animal Foundation con más de 2.000 dueños de perros encuestados, el 47% afirmaron que el cáncer fue la causa principal de la muerte de su perro. Son datos que no hacen sino confirmar uno de los principales cambios que Juan Borrego ha observa- do en los últimos cinco años: el aumento del diagnóstico del cáncer por parte de los veterinarios. “Puede que se deba al au- mento de la disponibilidad demejores equipos diagnósticos, pero creo que sobre todo se debe a una mayor concienciación y cono- cimiento sobre el cáncer, lo que permite que se diagnostiquen y traten antes”, sostiene. Al respecto, comenta también que frases habituales de hace cinco años entre los veterinarios como: «No te remito casos porque no veo casi ninguno de cáncer» cuando se sabe que más de la mitad de pacientes de más de 10 años mueren de esta enfermedad; o cuando ven un bulto y dicen: «Vamos a es- perar a ver si crece» cuando lo único que puede pasar es que crezca y malignice, y hasta de los dueños de animales cuando dicen: «No sé si merecerá la pena tratarlo» cuando la misión del profesional es diagnosticar y dar opciones, son cada vez menos frecuentes. “Esto es muy importante, porque los veterina- rios no sólo son la primera línea de defensa en la batalla contra el cáncer, sino que tratan y curan muchos pacientes con cáncer a diario”, dice Borrego. Añade que “sin estos compañeros, los especialistas no veríamos pacientes, ya que dependemos de esos diagnósticos y de su concienciación así como de la de los dueños”. Reconocimiento del sector Sea como fuere, lo cierto es que la oncología veterinaria es una disciplina en auge, tal y como asegura el director del IVOC, para quien los veterinarios “tenemos una oportunidadmagnífica para jugar un papel fundamental en la medicina oncológica compara- da con el fin de lograr la curación o, en ausencia de cura, transfor- mar el cáncer en una condición crónica manejable”. A su parecer, el interés por esta disciplina y el reconocimiento de su impor- tancia entre los profesionales veterinarios es evidente. “Sólo hace falta ver la cantidad de cursos de formación continuada en la materia y los equipos multidisciplinares con que cuentan muchos hospitales en España, donde se trabaja a un nivel muy similar al de los países anglosajones”. Borrego pone el ejemplo del Hospi- tal Aúna Especialidades Veterinarias, donde trabaja, según sus propias palabras, “con uno de losmejores cirujanos oncólogos que conozco, Manuel Jiménez, haciendo un equipo que incluye inter- nistas, anestesistas e intensivistas que no he podido encontrar ni en las mejores instituciones académicas americanas”.

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