En el año 2008 Mars Inc., grupo empresarial al que pertenece la marca de alimentación de mascotas Royal Canin, estableció una alianza con la entidad The Eunice Kennedy Shriver National Institute of Child Health and Human Development en Estados Unidos que fomentase la investigación y crease una base de pruebas científicas para aumentar el conocimiento de los beneficios que proporciona la interacción entre los humanos y los animales, especialmente en los niños. A continuación se recogen las principales conclusiones de esta investigación. Incluyen los últimos resultados del National Institutes of Health/Mars-Waltham y los estudios propios de Waltham (Marzo 2015).

Beneficios

1. Salud física

Salud general. Los dueños de mascotas visitan con menor frecuencia al médico y utilizan menos medicación. Los beneficios también se incrementan en proporción a la duración de la tenencia, por lo que aquellos que poseen mascotas más tiempo también están más sanos.

Salud cardíaca. Tener una mascota reduce la presión sanguínea y disminuye el riesgo de enfermedades cardíacas y de colesterol alto. Asimismo, los propietarios de animales también experimentan una significativa diferencia en el índice de supervivencia en ataques al corazón: el 28% de los pacientes con mascotas sobrevive a graves ataques cardíacos, comparado con solo el 6% de los que sobreviven pero que no tienen mascota.

En adultos de edad avanzada (entre 50 y 83 años) con hipertensión leve, la presencia de un perro fue asociada a una baja presión sanguínea sistólica y diastólica y la de un gato con baja presión diastólica y alta presión sistólica durante las actividades normales diarias de los propietarios. Estos resultados sugieren que la tenencia de animales, especialmente la de perros, puede ayudar a reducir la progresión de la hipertensión. The American Heart Association ha publicado una declaración científica que apoya el papel que las mascotas pueden desempeñar en la disminución del riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.

Impacto en la actividad física y peso. En un estudio australiano, las probabilidades de conseguir un grado de actividad física adecuado fueron del 55% al 77% mayores entre los dueños de perros que entre los que no tienen. Utilizando los datos recogidos del Estudio de Avon de padres e hijos (ALSPAC),  nacido en Reino Unido a principios de la década de 1990, los investigadores encontraron que las mujeres embarazadas que poseían perros eran un 50% más propensas a cumplir las 3 horas recomendadas de actividad por semana (equivalente a unos 30 minutos al día). Por su parte, los dueños de perros también tendían a participar más en caminatas a paso ligero que quienes no tenían perro.

2. Salud psicológica

Reducir el estrés y proporcionar apoyo social. El apoyo social puede actuar como un amortiguador frente a las tensiones de la vida cotidiana y se ha demostrado que las personas que conviven con mascotas tienen respuestas fisiológicas más saludables al estrés, incluida una menor frecuencia cardíaca basal y menor presión arterial; asimismo, demuestran menos reactividad cardiovascular y mayor recuperación al estrés leve.

Depresión. A través de técnicas meta analíticas se ha demostrado que la participación en las actividades y terapias asistidas por animales puede producir una mejora significativa en la depresión (los estudios se llevaron a cabo principalmente en centros para la tercera edad).

Mejorar la atención. Los niños que recibieron tratamiento para el trastorno por déficit de atención por hiperactividad mostraron mejorías significativamente mayores en el control inhibitorio (capacidad de concentrarse en una tarea sin distracción) y en la atención durante una actividad realizada con perros, comparados con los resultados de un grupo de niños que recibieron tratamiento similar sin perros.

3. Niños

Control del peso corporal. Los niños entre 5 y 6 años de edad pertenecientes a familias con perros tienen menos tendencia al sobrepeso y la obesidad.

Desarrollo infantil. Los niños más pequeños y los niños sin hermanos muestran mayor apego a los animales domésticos, lo que sugiere que las mascotas pueden ser particularmente importantes para estos niños. Los niños que participaron en un programa extraescolar de aprendizaje equino demostraron mejoras en la competencia social, incluida la mejora de la autoconciencia, la autogestión, la responsabilidad personal, la toma de decisiones y las habilidades relacionales. Esto es importante porque se ha  demostrado que la promoción de las competencias personales y sociales en contextos extraescolares puede provocar mejoras de gran alcance en otras áreas, como la autoconfianza, la autoestima, las calificaciones y los resultados de las pruebas de rendimiento.

4. Otros beneficios

Inmunidad. Tener mascotas en el hogar se ha vinculado a mejoras en la función inmunitaria en los niños, que incluye una menor prevalencia de las infecciones respiratorias y de las gastroenteritis.

Cáncer. La tenencia de mascotas se asocia con un menor riesgo de padecer linfoma de Hodgkin y cuanto mayor es la duración de la tenencia de mascotas, menor es la probabilidad de desarrollar este tipo de cáncer. Los autores del estudio que lo avala suponen que la exposición a los animales durante la infancia puede reducir la prevalencia de alergias más tarde durante su vida y es posible que la reducción del riesgo de sufrir linfoma de Hodgkin se deba a la alteración de la función inmunitaria y la desensibilización a los alérgenos.