Las labores de dirección no le han impedido seguir colaborando con otros especialistas y con centros de prestigio internacional en Bélgica, Holanda y Francia. Presidente de la Sociedad Española de Traumatología y Ortopedia Veterinaria (SETOV) desde 2012 a 2015, se ha especializado en traumatología, ortopedia y neurocirugía. "Estas áreas han experimentado notables avances tanto en los métodos de diagnóstico como en los implantes y materiales". Y añade: "Por ejemplo, en los casos neurológicos, cada día son más numerosos los centros en los que se pueden realizar tanto resonancia magnética como tomografía axial computerizada, técnicas ambas de diagnóstico por imagen avanzado y que nos permiten afinar mucho".

A pesar de los avances a nivel técnico, el colectivo tiene aún una asignatura pendiente. "Es necesario que se nos reconozca más nuestra labor a nivel social. Si bien es cierto que el ciudadano tiene hoy en día una mayor consideración de nuestra profesión, todavía nos queda mucho por hacer para equipararnos a los profesionales de la sanidad humana y otras profesiones liberales".

Según Ramón, la fórmula para conseguirlo está en "establecer un mayor control de la actividad que realizamos cada uno de nosotros en nuestros centros, de manera que quien ejerza su profesión de forma incorrecta, sepa que puede enfrentarse a sanciones graves. Esto en otros países está mejor regulado, no así en España".

Otro de los grandes retos para la clínica de pequeños animales es conseguir fidelizar al cliente que cada vez es más volátil y está mejor informado. "En mi opinión, la política de precios bajos para atraer al cliente acaba por volverse en contra tuya, por lo que no creo que sea una forma adecuada de captar clientela. En contraposición, apostamos por un buen trato y una buena preparación que debe ser trasmitida al cliente de forma clara y sencilla". En este sentido, Ramón considera esencial estar seguro de los conocimientos y saber expresarlos sin vacilaciones. "Es clave que cualquier cosa que le estés explicando lo hagas sin dudar, pues de lo contrario, le estarás transmitiendo desconfianza e incapacidad para realizar tu trabajo. Toda actuación tiene que tener una base sólida".

Se despide de nosotros recordando la importancia de poner en valor la profesión, y mejorar la imagen que se tiene de la actividad veterinaria. "Un indicador de esta falta de reconocimiento es la ausencia de compañeros en cargos de relevancia. Debemos estar más presente, y esto pasa por esforzarnos en mejorar día a día, y saber transmitir nuestra excelencia a la sociedad", concluye.